Medio Ambiente frena la puesta en marcha de una cantera de cuarcita en Villafranca del Bierzo

La Consejería de Fomento y Medio Ambiente de la Junta frena la puesta en marcha de una cantera de cuarcita en Villafranca del Bierzo (León) e informa desfavorablemente en la declaración de impacto ambiental del proyecto de concesión de la explotación 'Campanario', cuyo acceso es a través de una pista que parte de la carretera local que une los núcleos de Paradaseca y Sotelo.

En su informe, Medio Ambiente señala que el proyecto evaluado se encuentra dentro del Espacio Natural Sierra de Ancares con importantes valores geológicos y naturales, con presencia de oso pardo y urogallo cantábrico. Así, entiende que “teniendo en cuenta estas circunstancias, y debido a la creación del hueco de la extracción, los accesos y la escombrera producirán una alteración crítica debido a la modificación de la topografía y de la calidad visual”.

También señala que a pesar de las medidas correctoras provocará “una alteración evidente del paisaje y que no permitirá garantizar que la explotación no suponga una transformación sensible de la realidad física y biológica del Espacio Natural 'Sierra de Ancares', en virtud del cual se ha iniciado la redacción del Plan de Ordenación de los Recursos Naturales.

Otro punto advierte de que dicha cantera puede causar afecciones significativas en el lugar incluido en la Red Natura 2000 -LIC y ZEPA Sierra de Ancares (ES4130010)-, así como afectar a la presencia de especies de flora incluidas en el Catálogo de Flora Protegida de Castilla y León y eliminar 18,82 hectáreas de pinar de repoblación y vegetación de matorral, “reflejo del esfuerzo por recuperar la cobertera forestal en el Espacio Natural”.

Por otro lado, Medio Ambiente considera que la alteración de la calidad del paisaje será “significativa y visible” desde el entorno de los núcleos de población, vías de comunicación que discurren por el entorno o las rutas promovidas desde distintas entidades, y destaca la proximidad de la zona de actuación a cursos de agua, principalmente arroyos que desembocan en el río Burbia. Así, entienden que “existen otras alternativas para llevar a cabo el proyecto evaluado, ya que su objetivo (la extracción de cuarcita ornamental) puede ser conseguido en otras localizaciones”.