La Cordillera Cantábrica cuenta 12 osas y 21 crías
El censo total de las cuatro comunidades que comparten el macizo suma un total de 104 ejemplares pardos, 40 osas con 64 crías
-ICAL
La Cordillera Cantábrica en Castilla y León, tanto en la zona occidental como en la vertiente oriental, contabilizó en 2015 un total de 12 osas con 21 crías, una vez analizado el censo elaborado por la Junta. El número total de animales entre las comunidades de Asturias, Galicia, Cantabria y Castilla y León suma 40 osas y 64 crías.
El censo de la población de osas con cría de la Cordillera Cantábrica correspondiente a los años 2014 y 2015 fue presentado ayer en Oviedo por la consejera de Desarrollo Rural y Recursos Naturales, María Jesús Álvarez, durante una rueda de prensa en la que participaron también el director general del Medio Natural de Castilla y León, José Ángel Arranz, el director general de Recursos Naturales de Asturias, Manuel Calvo, y el director general de Montes y Conservación de la Naturaleza de Cantabria, Antonio Lucio.
El 2014 arrojó la cifra de 34 osas (28 en la subpoblación occidental y 6 en la oriental) con 67 crías (57 en occidente y 10 en oriente). Ese año se censaron 22 osas y 44 crías en la zona occidental de Asturias y 6 osas y 13 crías en Castilla y León, mientras, en la parte oriental, habitaron 5 osas y 8 crías en Castilla y León, y una osa y dos crías en Cantabria.
En el censo de 2015 se contabilizaron 6 osas más y 3 crías menos. Del análisis del periodo comprendido entre 2000 y 2015 se desprende la consolidación y el incremento de la subpoblación osera occidental y un escenario demográfico más incipiente en la oriental, con un ligero aumento, informa Ical.
La estimación global de la población es mucho más compleja, dado que el oso es una especie de amplio espectro de distribución, forestal y esquiva. Para elaborarla se utilizan un conjunto de técnicas, entre las que figura el seguimiento directo, estudios genéticos de restos localizados al azar o sistemas de captura de pelo, así como análisis de índices específicos en muestreos dirigidos.
Con los datos globales del 2015 y la media de los últimos 6 años, se estima que la población de oso pardo en la cordillera está comprendida entre 230 y 260 ejemplares, de los que entre 190 y 220 corresponden a la subpoblación occidental y 40 a la oriental.
En las poblaciones de oso pardo, el seguimiento de las unidades familiares se realiza mediante un método de conteo que permite estimar la tendencia demográfica de las poblaciones. Debido a su menor área de campeo y a su fácil detectabilidad, ya que sus hábitos son principalmente diurnos, estas unidades familiares facilitan el seguimiento del conjunto poblacional.
Mediante observación directa, a través de telescopios, se puede diferenciar a los grupos familiares. Los resultados obtenidos, una vez desechadas las repeticiones y las informaciones no confirmadas, permiten establecer el mínimo de osas con crías, así como su evolución a lo largo del tiempo.
Las cuatro comunidades de la cordillera coordinan anualmente sus acciones para ofrecer unos resultados del conjunto poblacional de osas con cría que se reparten por el territorio.