La Junta cierra el ocio nocturno a las 2.00 horas y veta el consumo en sus barras y de pie

El ocio nocturno tendrá que bajar las persianas antes de lo que marcan las licencias municipales. El vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Francisco Igea, anunció en la mañana del jueves nuevas restricciones para el sector ante el avance de la incidencia entre los sectores más jóvenes de la población. Los locales deben cerrar a las 2.00 horas desde el viernes y no podrán admitir nuevos clientes desde una hora antes.

Además, no se permitirá el consumo en las barras de estos establecimientos. Las peñas deberán permanecer cerradas y las pistas de baile tampoco se podrán utilizar. Los aforos se quedan en un tercio para discotecas, la mitad del permitido en locales con aforo superior a 40 clientes y un 75% para los que lo tienen por debajo de esta cifra.

La idea es "ser capaces de controlar los contactos allá donde se están produciendo", y esto atañe al "aumento espectacular entre personas de 12-15 años a 29". Igea también pidió a los ayuntamientos de la Comunidad que pusiesen todos los medios para evitar la 'alternativa': "que se cumpla la prohibición del botellón es esencial".

No obstante, cargó contra el Gobierno y su rechazo a las medidas propuestas por Castilla y León. "Hubiese sido más fácil para los ayuntamientos si hubiese toque de queda. Así, tenemos que vamos a desplazar" las reuniones de los locales de ocio nocturno a zonas de control más difícil.

El vicepresidente de la Junta también aclaró por qué se opta por esta restricción al ocio nocturno y no por el paso a nivel 2. "No queremos hacer daño a quien no supone un problema", y ahora los casos no se concentran entre la clientela de restaurantes y establecimientos análogos. "No tiene sentido hacer más daño del que entendemos que no es útil".