Un equipo más sólido

El Numancia puso fin ante el Cartagena a una racha de tres partidos sin ganar y también acabó con las dudas que había generado su juego, especialmente ante el Rayo Vallecano y el Celta. Este salto de calidad en las filas rojillas se ha gestado a base de una mayor seguridad en la defensa que ha dado mayor confianza a todas sus líneas. Contra el Cartagena ya no se vio al equipo frágil que quedó noqueado en Vallecas y que fue superado por el Celta en Los Pajaritos. El Numancia a crecido desde la línea de cobertura.

 

En las tres primeras jornadas de competición, los de Juan Carlos Unzué habían sido incapaces de mantener su portería a cero, un logro que alcanzaba el pasado sábado ante los murcianos. El dúo formado por Boris y Culebras fue el elegido por el míster para arrancar la competición, pero la endeblez mostrada en la línea de cobertura tanto ante el Rayo Vallecano como ante el Celta hizo que el técnico navarro cambiara de opinión. Unzué decidió dar la oportunidad a dos hombres como Jaio y Pavón que partían desde el inicio con desventaja con respecto al de Puertollano y al de Avilés. Jaio y Pavón han pasado de estar en el banquillo o fuera de la convocatoria a ser dos de los puntales esenciales en la zaga. Ante el Cartagena estuvieron impecables, especialmente el defensa granadino.

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