CICLISMO
La UCI encuentra un motor escondido en una bicicleta en el Mundial de ciclocrós
La sospechosa, la belga Fenke Van der Driesche, de 19 años, ha negado los hechos pero se expone a una sanción de seis meses
La ciclista belga Femke Van Den Driessche durante la prueba de cicclocross en Heusden-Zolder en la que la UCI ha descubierto un motor escondido en su bicicleta.-
Un presunto caso de dopaje tecnológico ha alterado el Mundial de ciclocrós que se celebra este fin de semana en Zolder (Bélgica). La Unión Ciclista Internacional (UCI) , a través de un comunicado oficial, ha confirmado “haber encontrado indicios del primer fraude tecnólogico” en la historia del ciclismo. Todo sucedió el sábado cuando un comisario de la federación internacional observó unos cables sospechosos en una bicicleta perteneciente a la delegación belga. La bici pertenecía a la corredora de 19 años, Femke Van den Driessche, que era la principal favorita para alzarse con el oro en el Mundial sub-23, pero que abandonó tras romper la cadena.
Según informa la web especializada en ciclismo ‘Ciclo 21’, los comisarios sospecharon de los cables que salían del eje del pedalier. Y aquí comenzó el follón. El padre de la chica negó que la bicicleta fuera de su hija y la corredora que se trataba de la bici que utilizaba un amigo, que ella había empleado el año pasado, que el amigo, con quien entrena, había inspeccionado el circuito antes de la carrera para pasarle datos técnicos sobre el mismo, que en ningún caso le informó de que llevara un motor en el interior y que el mecánico de la selección belga se confundió y limpió la bicicleta creyendo que era la suya. “Posiblemente, ahora, haya terminado mi carrera deportiva, explico Van der Driessche, que se expone una sanción de al menosseis meses de inactividad y a una multa que puede oscilar entre 18.000 y 180.000 euros.
LA CONFIRMACIÓN DE LA UCI
Brian Cookson, presidente de la UCI, confirmó este domingo que la federación internacional tenía en su poder una bicicleta, causante de fraude tecnológico, y que la estaban investigando. El dirigente informó que los controles de bicicletas se habían incrementado el año pasado y que se había elaborado una ordenanza para poder sancionar a los infractores.
La UCI sospecha desde finales de la década pasada de la posible utilización de bicicletas con motores escondidos en su interior, que mejoran el pedaleo e incrementan la velocidad. En el Tour del 2010se estrenaron por primera vez los controles de bicicleta, pero hasta este sábado no había sido localizada ninguna bicicleta sospechosa.