Una plaza de descenso en liza

El Numancia se ha metido solito en el lío de la lucha por la permanencia. Su deriva de resultados, ha ganado dos partidos desde que se estrenó con una victoria a domicilio en Almendralejo hace diez semanas, finales de febrero, sumando nueve de 30 puntos en juego, le ha llevado a una situación comprometida cuando restan seis jornadas para completar el calendario de competición. El conjunto soriano ocupa la decimoséptima posición con 40 puntos, a tres del descenso, frontera que marca el Lugo. El equipo gallego ocupa la plaza que resta por asignar ya que las otras tres parecen destinadas al Reus, fuera de la competición desde el inicio de la segunda parte de la competición, al Córdoba, a trece puntos de la salvación pese a que esta semana sumará tres de forma directa sin jugar por tocarle el enfrentamiento con el Reus, y el Gimnàstic de Tarragona, a doce. Tanto al club cordobés como al tarraconense se les presenta un escenario muy complicado para recuperar posiciones después de una campaña en la que han demostrado una trayectoria sin crédito por sus continuos desaciertos y resultados desfavorables. Casi descartados. Les salva, de momento, las matemáticas, no sus marcadores.

La primera consecuencia es que para el resto de implicados en la lucha por la salvación únicamente resta una plaza que evitar. Y no es poco aunque podría haber sido peor. Su suerte pasa por la mala campaña de los casi descendidos. La plaza la ocupa el Lugo (37 puntos), que también se ha visto inmerso en una deriva calamitosa. En estos momentos es el señalado para acompañar a los otros tres de abajo. El impulso tomado por elExtremadura (42 puntos) ha propiciado que el resto de sus rivales en ese intento de huida de la zona roja se vean amenazados. Tenerife, Numancia, Rayo Majadahonda, Extremadura, Zaragoza y Las Palmas no encuentran la tranquilidad a falta de seis jornadas. Ni el club aragonés ni el grancanario aún respiran con sosiego tras haber ganado en la jornada precedente sus compromisos. Los choques directos pondrán a prueba su distancia con el Lugo. El partido del fin de semana entre el Tenerife y la Unión Deportiva Las Palmas puede significar la casi salvación para los amarillos, y por consecuencia, el hundimiento de los chicharreros, o un alivio para estos y la vuelta a la intranquilidad para los de Las Palmas. Y siempre mirando de reojo a lo que pueda conseguir el Lugo, que se enfrenta al Almería el fin de semana. El Zaragoza, por su parte, afronta un calendario final con el Deportivo, Extremadura, Sporting, Málaga, Numancia y Tenerife. Una mezcla de rivales en pugna por la zona noble y directos en la huida del descenso. Su colchón de puntos le permite afrontarlo con un toque mayor de tranquilidad que el resto.

El Extremadura también depende de sus propias fuerzas porque en este breve recorrido deberá medirse al Lugo y al Zaragoza en su intento de permanencia. También encarará partidos de envergadura con el Mallorca o el Cádiz y choques con el Alcorcón o el Gimnàstic, en una de las últimas oportunidades para el club de Tarragona. Todo está en el aire. Al igual que para el Rayo Majadahonda. El debutante se está aferrando a la categoría y cuenta a su favor con los tres puntos adicionales del partido que le queda por disputar con el Reus. Lo mismo que el Numancia. Los tres puntos seguros les ponen en una posición de cierta ventaja respecto a los otros implicados, pero no les permite la tranquilidad ni la seguridad de eludir el descenso. El equipo madrileño recorrerá este tramo jugando con el Elche, Albacete, Las Palmas, Córdoba y Oviedo.

El Numancia viaja a Albacete para jugar el domingo en otro intento de ampliar la distancia con el descenso en uno de los apartados que más le ha costado a lo largo del curso, jugar fuera de Soria. El Alcorcón en Los Pajaritos es la siguiente cita para desplazarse a Oviedo en el posterior compromiso. Los tres puntos del partido con el Reus los sumará una semana después y cerrará la fase regular ante el Zaragoza y Las Palmas. Lo paradójico de la presente campaña es que el club maño y el numantino se pueden medir por evitar el descenso cuando hace un año lo hacían por una plaza para jugar la final de la promoción de ascenso. Una demostración de lo complicado de una categoría con tanta igualdad, con equipos de mucho peso en una competición larga que desgasta a cualquiera. La victoria pone las diferencias entre los implicados, pero el Numancia mirará de reojo a sus inmediatos perseguidores. El Tenerife es el cortafuegos con el descenso y debe jugar con Las Palmas, Granada, Elche, Oviedo, Lugo y Zaragoza, mientras que el equipo lucense es el precipicio y se mide al Almería, Sporting, Deportivo, Extremadura, Tenerife y Gimnàstic.