«La temporada ha sido fenomenal»

«La temporada ha sido fenomenal». Así la calificó el presidente del Río Duero Soria, Alfredo Cabrerizo, recién llegado ayer por la mañana de Canarias, comandando la expedición del equipo soriano. El máximo rector del club celeste destacó el gran trabajo del cuerpo técnico y de los jugadores en las dos competiciones domésticas en las que presentó candidatura para el título. En la Copa lo certificó con la victoria en la final de Los Pajaritos frente al Pamesa Teruel. En la liga, el CV Guaguas impuso su autoridad en una serie con marcado dominio del conjunto amarillo. Pese a la derrota, la sensación no era de decepción. El elevado nivel de juego, la contundencia y la solvencia del conjunto de Sergio Miguel Camarero no encontraron respuesta entre los de Alberto Toribio para contrarrestar su superioridad durante los tres partidos disputados, dos en Soria y el último en el Centro Insular de Deportes de Las Palmas.

El encuentro del pasado sábado cierra la temporada para el Río Duero, que ya disfruta del descanso. El ejercicio lo concluyó como el mejor desde su aparición en septiembre de 2013. «Si nos dicen hace diez años que íbamos a protagonizar una temporada así, no nos lo creemos», destacó Alfredo Cabrerizo, consciente de que puede ser irrepetible acabar con el campeonato de Copa y con el subcampeonato de la Superliga. El conjunto soriano, además, mantuvo una gran firmeza a lo largo de la fase regular defendiendo la segunda plaza, siempre perseguido por el equipo turolense, al final tercero de la clasificación y subcampeón de la Copa del Rey. Uno de los rivales del Río Duero, al que también le cerró el paso a la serie final al eliminarlo en las semifinales por el título de la Superliga. Teruel se adelantó en la serie en su feudo de Los Planos, pero perdió en los dos siguientes encuentros en Los Pajaritos. 

En la serie final, el grupo de Alberto Toribio cayó en los tres encuentros, anotando dos sets a su favor. El primer parcial del segundo enfrentamiento y el tercer set del último partido cuando ya el título se lo había adjudicado el CV Guaguas al ganar los dos primeros juegos. Aunque hubiera ganado ese encuentro el equipo soriano, no podía sumar más que dos puntos, el título ya lo tenía en posesión el club canario. Finalmente, no pudo vencer en ninguno de los tres partidos disputados, pero no se entiende como un demérito porque el CV Guaguas ofreció una versión superior, inalcanzable en ese momento.