"La gran virtud de este Grupo Herce es que nunca se rinde"

El Grupo Herce Soria lograba el pasado martes una victoria histórica en la Copa CEV que le clasificaba para los cuartos de final y de esta manera redondeaba un año fantástico para los intereses del club. Su presidente, Alfredo Cabrerizo, analizaba el momento dulce que vive la entidad y explicaba que el gran activo de los celestes tiene que ver con su carácter y su lucha sobre la cancha. «La gran virtud de este equipo es que nunca se rinde». La imagen y semejanza de su entrenador, un Alberto Toribio que se está ganando a pulso el caché de ser uno de los técnicos de referencia del voleibol español.

«Alberto (Toribio) está realizando un inmenso trabajo y está dando sus frutos», indicaba Cabrerizo, quien tiene muy claro que la figura del preparador vallisoletano está siendo fundamental en el crecimiento del club desde que llegará hace ya dos años y medio. «Su carácter lo ha sabido impregnar a la perfección en la plantilla». Y es que con Toribio, el salto de calidad de la entidad ha sido evidente con el punto álgido de la consecución del título de la Copa del Rey. «Este ha sido el año del despegue del Río Duero, un salto sin duda hacia adelante», comentaba Cabrerizo, quien recordaba que, además del título copero, los sorianos son los actuales subcampeones de la Superliga.

Ha sido un 2023 de ensueño y da cara a 2024 el listón está muy alto en lo que a logros se refiere, aunque este Grupo Herce va a por todas. «¿Deseos para el futuro? Ha sido tan maravilloso 2023 que pediría que tuviera 14 meses», señalaba el dirigente.

Los celestes ahora están en pleno descanso para desconectar de la batalla que tuvieron en Ginebra y que le catapultó a los cuartos de final de la Copa CEV. «Nadie esperaba ganar en Suiza 0-3, aunque sí sabíamos que teníamos opciones de pasar la eliminatoria porque en Soria no jugamos un buen partido», apuntaba Cabrerizo. El Chenois sufría en sus propias carnes la mejor versión de un Grupo Herce que «jugó un partidazo» para dejar en la cuneta a un conjunto helvético que en el tercer set llegó a tener una renta de 21-16 para haber nivelado el marcador. «Nunca se le perdió la cara al partido y eso es por el carácter que tienen los jugadores y el cuerpo técnico», indicaba el presidente.

El premio es jugar los cuartos de la CEV ante «un equipazo» como es el Arkas Esmir de Turquía. «Es un voleibol con mayúsculas el que nos vamos a encontrar. Los turcos son de otro nivel», reconocía Cabrerizo. En el seno del Grupo Herce saben que los otomanos son «los favoritos» para pasar de ronda, aunque «no renunciamos a nada y creo que ellos no vendrán para nada relajados», aseguraba Cabrerizo. El presidente lo tiene muy claro de cara al este cruce europeo: «Lo que tenemos que hacer es disfrutar, disputar, luchar al máximo y ver lo qué sale».

El partido de ida se jugará en Los Pajaritos y, aunque no está confirmado, todo apunta que será el miércoles 10 de enero a partir de las 20.00 horas. La vuelta se jugará en la ciudad turca de Esmirna a la semana siguiente.