'Maraton man' vuelve a correr por medio mundo

El 30 de marzo de 1919 se celebró la primera edición de la Behobia-San Sebastián, una de las mejores y más emblemáticas carreras populares que se organizan en el ya cargadísimo calendario 'runner'. Pero la Behobia es más que una carrera, como bien han podido comprobar los cientos de miles de corredores que han disfrutado de sus animadísimos -y durillos- 20 kilómetros. Y hasta tal punto es singular, que ha sido elegida para formar parte de la segunda temporada del programa del prestigioso canal #0'Maratón Man', una original producción que es más que un programa de 'runners, y que vuelve a demostrarlo desde este domingo, 27 de noviembre (21.00 horas).

 

Y el 'maratón man' en cuestión que hace tan peculiar este espacio esRaúl Gómez, un actor de profesión y 'runner' de vocación que se dedica a correr las más curiosas, divertidas y originales carreras populares que se celebran por todo el mundo, y de paso descubrir las no menos curiosas, divertidas y también emocionantes historias humanas que corren en ellas.

“La primera temporada tuvo solo seis entregas, porque era un formato muy novedoso y no teníamos claro cómo sería aceptado por la audiencia -explica María José Rodríguez, gerente del canal #0-. Pero la respuesta ha sido tan espectacularmente buena, con más de un 80% de comentarios positivos, que nos ha animado a esta nueva entrega, que ya es de nueve capítulos”.

La directiva de la plataforma de tele de pago Movistar+reconoce que este éxito les ha sorprendido. Pero es que el programa es sorprendente. Y lo es por dos razones básicas: su original planteamiento y, sobre todo y ante todo, por el talante y empatía arrolladora de Raúl Gómez, un personaje que ya demostró su desenvoltura y capacidad de 'showman' en el ya mítico 'Caiga Quien Caiga', como hombre de negro.

Pero, en realidad, las carreras en las que participa Gómez (nueve en estas entrega, entre maratones y 'medias') no son sino la excusa para mostrar las fascinantes historias de gente anónima que el actor se encuentra en las carreras.

“Es un programa de 'running', sí, pero abierto a todos los públicos, porque detrás de cada 'runner' hay una historia, y algunas tienen un impacto emocional extraordinario”, explica David Moncasí, director del programa, quien insiste en que todo lo que aparece en las grabaciones “es verdad”.

“Buscamos que sea lo más fresco y real posible -añade Moncasí- y por eso nos lanzamos en paracaídas con un guion básico y esperar a ver qués lo que sale, contando, claro está, con el gran potencial de Raúl para captar y empatizar con todos los que va conociendo en las carreras”.

Y, efectivamente, la simpatía arrolladora de Raúl Gómez le permite relacionarse con todos los que se encuentra, tanto dentro como fuera de su carrera. Y él se lo pasa pipa con este trabajo, que considera “¡Gloria bendita!” (casi todo para él es “gloria bendita”).

“Es un placer poder hacer este trabajo, por partida doble -explica el actor catalán-. Primero, porque me lo paso muy bien corriendo, pero también porque me encanta escuchar historias fascinantes de gente anónima, que te explican cómo el correr les ha cambiado la vida, historias de superación... Es un programa optimista, y nosotros somos cazadores de sonrisas”, sentencia Gómez.

Entre las carreras que ha corrido en esta segunda temporada (nueve, en 130 días y en tres continentes), Gómez destaca el medio maratón de Jordania ("250 'runners' corriendo en silencio y solos"), el Marathon du Medoc (con vino francés y paté en los avituallamientos) o el Maratón Habana, de Cuba, “en la que me encantaría encontrarme a Donald Trump”, suelta un jocoso Gómez, que muestra su interés por el tupé del flamante presidente de EEUU: “Le preguntaría si es real”. Y si por improbable casualidad se lo encontrase, que nadie dude de que se iría directo a preguntárselo, porque él es así. “Me muestro como soy -confiesa-. Siempre voy de buen rollo y nunca he tenido problemas con la gente”.

Así las cosas, Raúl Gómez, se siente tan identificado con su papel de 'maratón man'.Tanto, que no quiere parar de correr, y exclama, exultante: "Quiero ser el Jordi Hurtado del 'running'”.

A tal longevidad audiovisual quizá sea difícil que llegue (serían muchas ultramaratones), pero lo que parece casi seguro es que Gómez seguirá corriendo en una futura tercera temporada, según adelantan desde la dirección de #0.

Pero para reslatar y potenciar toda la frescura y empatía que muestra Raúl Gómez ante las cámaras hay tras la cámara un brutal trabajo de postproducción. “Para cada programa grabamos una media de 20 horas, que deben quedar reducidos en los 50 minutos del episodio, un proceso que nos lleva mes y medio de edición y montaje por capítulo”, resume Moncasí. “Hay que hacer muchísimo trabajo para que quede un buen programa de televisión, pero -insiste el director-, todo lo que aparece es verdad”.