La policía húngara vuelve a usar gases lacrimógenos
Los agentes actuaron contra un grupo de personas que intentaron cruzar la frontera.
La policía húngara ha vuelto a emplear gases lacrimógenos y un cañón de agua contra los refugiados que intentan entrar en su territorio desde Serbia a través de la frontera de Roszke.
La policía ha justificado la acción señalando que ha actuado contra un grupo que intentaba forzar uno de los pasos de la frontera, que ha sido blindada por las autoridades húngaras.
DETENCIONES
Desde este martes, la policía húngara detiene a cualquier persona que cruce la frontera de forma ilegal. Eso hizo que este martes solo cruzaran 367 refugiados, que fueron todos detenidos.