MANIFESTACIÓN EN BERLÍN
La ultraderecha alemana vuelve a salir a la calle contra la política migratoria de Merkel
La protesta ha sido la menos concurrida de las tres que se han llevado a cabo en la capital alemana este año
La ultraderecha ha vuelto a marchar el sábado por las calles de Berlín por tercera vez en lo que va de año. En esta ocasión han sido unos 1.300 extremistas, según la policía, los que se han reunido en la plaza de Washington bajo el lema 'Merkel tiene que irse'. Convocados por un grupo llamado “Nosotros por Berlín. Nosotros por Alemania”, manifestantes con cabezas rapadas, tatuajes y toda la parafernalia posible y permitida (la ley prohíbe por ejemplo las esvásticas) de la extrema derecha se han reunido para acusar a Merkel de convertirles en “extranjeros en su propio país”. La policía ha detenido a una persona por haber realizado, supuestamente, el saludo hitleriano. Los símbolos nazis están prohibidos en el país.
La capital era hasta ahora un tabú, ya que siempre que los neonazis habían tratado de convocar marchas se habían encontrado una fuerte oposición, además de que los asistentes nunca sobrepasaban algunos centenares de personas. Esto ha cambiado a raíz de que en el verano de 2015 cientos de miles de refugiados llegasen al pais atraídos por “mamá Merkel”, como la llamaban algunos.
La contramanifestación, que salió de la Plaza de Alexander, unió a miles de berlineses para manifestarse “por una mayor tolerancia”. Según los organizadores, habrían sido unas 1500 personas las que se han concentrado en contra de la ultraderecha, un número mucho menor que la última convocatoria de estas características. El bajo número de participantes en ambas marchas (en la manifestación neonazi fueron 3.000 el pasado marzo) podría deberse al poco tiempo de preparación de dichas convocatorias, ya que los neonazis avisaron el martes de que iban a manifestarse de nuevo en la capital.
Los ataques antisemitas registrados en 2015 en la capital alemana fueron 200 ataques, según la Oficina para la Información y la Investigación del Antisemitismo. Asimismo, los ataques a asilos contra refugiados han ido aumentando en lo que va de 2016: 30 ataques a albergues solo en la capital.