EXTRAÑO SUCESO EN MOSCÚ
Robado y recuperado poco después un cuadro de la galería Tretyakov ante la mirada de los visitantes
La pintura, obra de un pintor paisajista ruso, muestra un paisaje de Crimea, lo que dio a pensar que se trataba de un robo político
Un nuevo y extraño suceso ha puesto en la picota una vez más a la galeria Tretyakov, uno de los museos más importantes de Rusia. El domingo por la tarde, ante la sorprendida mirada de los visitantes que llenaban las salas del edificio, un hombre descolgó un cuadro realizado por Arjip Kuindzhi, un pintor paisajista ruso y se lo llevó con sus propias manos. Pasadas las horas, ya a mediodía de este lunes, el Ministerio del Interior ha anunciado la recuperación de la pintura y la detención del presunto ladrón.
La obra lleva por título 'Ai-Petri. Crimea'. Al tratarse de una representación de la principal montaña de la disputada península anexionada hace más de cuatro años por Rusia y cuyo perfil guarda un cierto parecido con la montaña de Montserrat, se especuló que podría existir un móvil político. Según fuentes ministeriales, el supuesto ladrón es un hombre de 31 años con antecedentes penales por posesión de drogas, y ha sido arrestado en el barrio de Zarechie, en las afueras de Moscú.
UN EMPLEADO DEL MUSEO
Un vídeo difundido por el portal de información 'Meduza' muestra cómo el individuo se aproxima a la pintura y se la lleva, mientras el público que le rodeaba no hace nada por frenarle el paso. El criminal pudo salir del edificio sin ser detenido ya que muchos pensaron que se trataba de un empleado del museo.
La principal sede de la Galeria Tretyakov posee una amplia colección de pintura rusa, en especial atención a los pintores paisajistas del sglo XIX, mientras que su anexo en Krymsky Val se concentra en el arte ruso del siglo XX, en particular en la pintura abstracta de Vassili Kandinsky y en el realismo socialista. El pasado mes de mayo, un vándalo provocó graves daños al cuadro 'Iván el Terrible y su hijo', del pintor Ilyá Repin. El atacante aseguró hallarse en estado de embriaguez y sentirse ofendido ante la visión de la pintura después de tomar "100 gramos de vodka" en el bar del museo.
Desde hace años, el óleo ha sido criticado de forma recurrente por sectores nacionalistas y ultraderechistas, que exigían la retirada de la pintur,a acusando al pintor Repin de "falsear la realidad". Ambos grupos han impulsado una rehabilitación parcial de controvertidas figuras históricas como el propio Iván el Terrible o el dictador Stalin.