Estrategia preventiva
El despliegue militar de los EEUU en Oriente Medio es solo disuasivo
El Congreso estadounidense sostiene que esta medida ordenada por Trump solo responde a la creciente tensión pero no quieren una guerra con Irán
Varios legisladores aseguraron que el despliegue militar en Oriente Medio ordenado por el presidente Donald Trump, es una medida disuasoria y descartaron que los EEUU vayan a entrar en guerra con Irán, tras reunirse con el titular de Exteriores, Mike Pompeo, y el de Defensa, Patrick Shanahan.
"Se trata de una respuesta para reducir la escalada de tensión, que obedece a una estrategia de disuasión para que Irán no se comporte de manera más agresiva", señaló el congresista Michael McCaul a la prensa.
Las palabras del legislador republicano se produjeron poco después de que Pompeo y Shanahan comparecieran en una audiencia del comité de Servicios Armados de la Cámara de Representantes de Estados Unidos para explicar a puerta cerrada la creciente tensión con Teherán.
AUMENTA LA TENSIÓN
Hace dos semanas, el Gobierno estadounidense ordenó el despliegue del portaaviones USS Abraham Lincoln y de su grupo de combate en aguas del golfo Pérsico, y envió a la base estadounidense de Al Udeid, en Catar, una flota de aviones B-52, con capacidad de emplear armas nucleares.
El Pentágono justificó esta maniobra alegando que existían "indicios" de que Irán se estaba preparando para "llevar a cabo operaciones ofensivas contra fuerzas e intereses estadounidenses en la región", pero en ningún momento ha publicado esta pruebas.
AMENAZAS PARA LOS EEUU
McCaul acusó a Irán de estar detrás de una serie de acciones que han supuesto una amenaza para los intereses de los EEUU o de sus aliados. "A través de fuerzas afines, Irán ha ejecutado o lanzado una serie de ataques, incluido el lanzamiento de cohetes en las proximidades de nuestra embajada en Bagdad, la presencia de buques en el golfo Pérsico y ataques con drones en Arabia Saudí", aseguró el republicano.
Por otro lado, el presidente del comité, el demócrata Adam Smith, calificó de "apropiado" el despliegue estadounidense en la región y coincidió en que no se prevé que la situación vaya a desembocar en un conflicto armado, aunque instó a todas las partes implicadas a actuar con prudencia para evitar este posible escenario.