POLÉMICA EN EEUU
Warner se suma al boicot a la ley antiabortista
La 'major' se une a Disney y Netflix y anuncia que no trabajará en los estados que apliquen la normativa
Sigue la ola contra las leyes antiabortistas en EEUU: Netflix, Warner, Disney, Universal, Sony... Casi todos los gigantes estadounidenses del entretenimiento siguen posicionándose y anunciando oficialmente que pueden dejar de filmar películas y series de televisión en Georgia u otros estados que buscan limitar el derecho al aborto, un tema muy polémico en EEUU.
"Estamos estudiando la situación y si la nueva ley entra en vigor, nos plantearemos buscar otros escenarios fuera de Georgia para nuestras nuevas producciones", ha dicho el grupo WarnerMedia (HBO, Turner, Warners Bros.), en un comunicado que se ha hecho público este jueves, 30 de mayo. El día anterior, Disney, líder mundial en el sector (Marvel,'Star Wars'...), también se apuntó a un boicot que abrió oficialmente Netflix el pasado martes. "Si la ley se aplica, tendríamos que replantear todas nuestras inversiones en Georgia", advirtió el administrador de contenido de la conocida plataforma de vídeo bajo demanda.
Georgia aprobó una ley a principios de mayo que prohibía los abortos tan pronto como se notara el latido del feto. Esto es aproximadamente la sexta semana de embarazo, una etapa en la que muchas mujeres aún no saben que están embarazadas. Se espera que esta entre en vigor en el 2020, salvo que haya antes un veto judicial, como ha ocurrido con algunas leyes similares promulgadas en otros estados conservadores (Alabama, Mississippi y Louisiana).
Reacción de Hollywod
El boicot contra Georgia de empezó a fraguar a finales de marzo con decenas de actores (Alec Baldwin, Don Cheadle, Ben Stiller, Mia Farrow), que amenazaron con no trabajar en producciones que se rodase en Georgia. Varios productores independientes los apoyaron, al igual que el sindicato de escritores de EEUU, que consideró que Georgia era "un lugar inhóspito para quienes trabajan en la industria del cine y la televisión."
Este boicot puede tener nefastas consecuencias para la economía de este estado sureño, yq que, gracias a sus ventajosas condiciones fiscales, había conseguido atraer en los últimos años muchos rodajes de grandes producciones del cine ('Black Panther', 'Avengers: Infinity War', 'Avengers: Endgame') y series ('Stranger Things','Ozark','The Walking Dead').
El año pasado, más de 450 producciones se rodaron en Georgia, con una inversión de 2.700 millones de dólares, y dio trabajo a 92.000 personas.
De momento, los grandes estudios de Hollywood se mantienen a la espera de lo que pase en Georgia y que harán públicas sus decisiones a través de su asociación, la Motion Picture Association of America (MPAA).
La razón de esta posición de 'stand by' viene motivada por las numerosas demandas legales que se han presentrado para evitar que la ley entrara en vigor. "Como ha señalado la MPAA, el destino de la ley antiabortista en Georgia, y similares en otros estados, se determinará a través de fallos judiciales", dijo este jueves a la agencia AFP un portavoz de Sony Pictures Entertainment.
Michael Taylor, director del Instituto de Medios para el Cambio Social de la Universidad del Sur de California, y productor de cine, considera que Hollywood ha tomado una "sabia decisión". "No sé si es una buena decisión financiera para ellos (...), pero creo que a veces tenemos que hacer lo correcto en lugar de lo prudente financieramente", explicó a la AFP.
Para Taylor, "la mayoría de las personas creían que esta polémica sobre el aborto había sido resuelto por el caso 'Roe versus Wade', con el que se creo jurisprudencia en el Tribunal Supremo de EEUU. Según aquel fallo judicial de 1973, se permite a las mujeres estadounidenses interrumpir su embarazo hasta alrededor de la semana 24 de gestación.
No es este el primer conflicto social que tiene el estado conservador de Georgias. En el 2016, planteó la promulgación de una ley sobre la libertad religiosa, que discriminaba a los homosexuales. El proyecto provocó una airada reacción en contra, a la que se sumaron Netflix y Disney. Finalmente, el gobernador del estado optó por vetar la ley.