EEUU demanda a Snowden por su libro de memorias
La Fiscalía sostiene que la publicación de la obra vulnera el acuerdo de confidencialidad que el exanalista de la NSA suscribió con la agencia
Estados Unidos ha demandado al ex analista de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) Edward Snowden por violar el acuerdo de confidencialidad con la publicación de un libro autobiográfico y las conferencias que ha dado en estos años, según ha informado este martes el Departamento de Justicia.
La Fiscalía estadounidense sostiene que 'Permanent Record' ('Grabación permanente') viola los acuerdos de confidencialidad que Snowden suscribió con la NSA y con la CIA como trabajador de estas agencias porque debía haber sometido el borrador del libro a una revisión preventiva. También menciona "los discursos públicos que ha pronunciado sobre cuestiones relacionadas con Inteligencia".
EVITAR EL LUCRO
Justicia ha aclarado que no pretende impedir la publicación del libro, porque hay un precedente judicial en contra de tal medida, sino solo evitar que Snowden se lucre con ello. Así, le reclama cualquier beneficio que obtenga de 'Permanent Record'. También ha demandado a las empresas implicadas en la publicación "solamente para garantizar que no se transfieren fondos" al ex analista.
"La capacidad de Estados Unidos para proteger información sensible de seguridad nacional dependen de que sus empleados y contratistas cumplan sus acuerdos de confidencialidad, incluidas las revisiones previas a cualquier publicación", ha dicho el fiscal Jody Hunt, en un comunicado.
FUGA A HONG KONG
Hunt ha subrayado que "el Departamento de Justicia no tolerará estas brechas de la confianza pública ni permitirá que las personas se enriquezcan a expensas de Estados Unidos". "La información de Inteligencia debe proteger a nuestro país, no proporcionar un beneficio personal", ha ratificado el también fiscal Zachary Terwilliger.
Snowden huyó a Hong Kong en 2013 tras filtrar a Wikileaks abundante información sobre la NSA. Posteriormente, se refugió en Rusia, donde podrá permanecer hasta 2020. Desde entonces, Estados Unidos le acusa de espionaje, un delito por el que podría ser condenado a entre 30 años de cárcel y cadena perpetua.
El Departamento de Justicia ha aclarado que la demanda presentada este martes es una acción judicial de carácter civil totalmente diferente de la acusación penal.