CONTROVERSIA EN FRANCIA
Macron se harta de Ségolène Royal
El Gobierno prevé cesarla como embajadora de los Polos por sus reiteradas críticas a la línea del Ejecutivo. Su actividad está siendo investigada por la Fiscalía financiera por un posible uso irregular de fondos públicos
En el Consejo de Ministros de François Hollande la relación entre Emmanuel Macron y Ségolène Royal era tan buena que cuando el joven titular de Economía se lanzó a la carrera por el Elíseo encontró en la excandidata socialista a la presidencia un apoyo entusiasta.
Pero las cosas empezaron a torcerse al ritmo que se frustraban las expectativas de Royal, que esperaba una cartera en el nuevo mundo macronista y se encontró con un premio de consolación: el de embajadora para la negociación de los polos Ártico y Antártico.
De ese puesto que ocupa desde septiembre del 2017 será cesada en breve por su insistente costumbre de criticar la política del presidente sin mantener el llamado derecho de reserva que se espera de un servidor público. En otras palabras, el Ejecutivo cree que ha sido desleal.
La antigua ministra de Medio Ambiente, también contrariada al ver que el presidente no proponía su nombre como comisaria europea, no se mordió la lengua durante la crisis de los chalecos amarillos, acusando al Gobierno de alterar el país y sembrar el desorden con decisiones políticas que enfadan a los franceses.
Ha criticado la política ecológica de Macron al declarar que durante su mandato el único que saldrá ganando será el lobi nuclear y, recientemente, ha fustigado el "ego machista" del Gabinete en la reforma de las pensiones o la cercanía de Macron con el mundo globalizado de los negocios. Era, pues, cuestión de tiempo que se oficializara la ruptura y Macron le mostrara la puerta de salida.
Como el diario 'Le Canard Enchainé' iba a informar de este asunto de manera inminente, Royal ha tomado la delantera y ella misma ha publicado en su Facebook el correo que el Ministerio de Exteriores y el de Transición Ecológica le enviaron el pasado 7 de enero anunciándole que en un próximo Consejo de ministros será cesada de sus funciones.
"SANCIÓN POLÍTICA"
Royal lo atribuye a una sanción política. No tengo intención de renunciar a mi libertad de opinión y de expresión garantizada por la Constitución. Tomo nota, ha escrito en la misma red social. La diplomacia es una misión, la política, otra, le recordaba este miércoles el primer ministro, Edouard Philippe, al ser preguntado por este asunto.
Paralelamente, la Fiscalía Nacional Financiera ha anunciado la apertura de una investigación preliminar sobre el uso que ha hecho Royal de los medios puestos a su disposición para cumplir las tareas de embajadora. La Fiscalía ha tomado la decisión tras las revelaciones de Radio France sobre posibles irregularidades.
En concreto, la fiscalía verificará en qué se han empleado los 100.000 euros asignados para gastos de representación y la labor de los tres colaboradores con los que contaba Royal. Según Radio France y la revista 'Le Point', el trabajo de la embajadora era más bien escaso y el presupuesto se usó para fines que tenían poco que ver con los Polos y mucho más con los viajes por Francia para promocionar su libro y su fundación 'Deseos de futuro por el planeta'.