Heraldo-Diario de Soria

DETENCIONES a la cúpula de eta

La fiscalía reclamará investigar a David Pla por el asesinato del senador Giménez Abad

La Fiscalía de la Audiencia Nacional pedirá reabrir la investigación al presunto jefe de ETA en relación con el asesinato del senador del PP en Zaragoza en 2001.

El asesinato del presidente del PP aragonés tuvo lugar en la calle Cortes de Aragón de Zaragoza.-EL PERIÓDICO

El asesinato del presidente del PP aragonés tuvo lugar en la calle Cortes de Aragón de Zaragoza.-EL PERIÓDICO

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EFE
Soria

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La Fiscalía de la Audiencia Nacional pedirá reabrir la investigación al presunto jefe de ETA David Pla, alias Mintxo, en relación con el asesinato del senador del PP Manuel Giménez Abad en Zaragoza en 2001, para determinar si proporcionó información para cometer ese atentado.

La Fiscalía espera que entre el material informático y documental intervenido en la casa rural de Saint Etienne de Baigorry, en la que fue detenido este martes junto a Iratxe Sorzabal, aparezcan indicios que refuercen la tesis de que la información obtenida por Pla y sus compañeros en Zaragoza sirvió para cometer el asesinato, según han informado hoy fuentes fiscales.

En cuanto a Sorzabal, las fuentes han explicado que en su día confesó su participación en 22 atentados del comando Ibarla en Guipúzcoa entre 1994 y 1997, aunque esta declaración policial no fue después ratificada en sede judicial, por lo que no tiene validez para sustentar una condena, de no aparecer otros datos que la corroboren.

Pese a ello, la Fiscalía pretende que se reabran todos esos casos para determinar si entre la documentación incautada en Francia aparecen indicios sobre la presunta participación de Sorzabal en alguna de esas acciones.

Entre esos atentados destaca el asesinato del jefe de la Ertzaintza Ramón Doral con una bomba lapa adosada en los bajos de su vehículo, en marzo de 1996, o la colocación de un artefacto en Irún que causó daños materiales, por el que ya hay una orden europea de detención y entrega (OEDE) contra ella por un delito de estragos.

Tras ser detenida en Francia y cumplir una pena de dos años fue expulsada a España en 1999, y el 30 de marzo de 2001 volvió a ser detenida en Hernani (Guipúzcoa) acusada de formar parte del comando Sugoi de ETA, al que se atribuyó la colocación del coche bomba que acabó con la vida de un mosso d'esquadra en Roses (Gerona).

Tras su detención denunció haber sufrido torturas por parte de agentes de la Guardia Civil y finalmente fue puesta en libertad por los tribunales por falta de pruebas.

En cuanto a la presunta vinculación de Pla con el asesinato de Giménez Abad, las fuentes de la Fiscalía han recordado que éste ya estuvo imputado por un delito de cooperación necesaria para la comisión de ese atentado junto a otros dos miembros del comando de información que integraba en Zaragoza, conocido como comando Aragón.

Sin embargo, el juez del caso, Santiago Pedraz, consideró que no había indicios suficientes para mantener imputados a ninguno de ellos porque los datos que facilitaron a ETA eran muy genéricos, ni siquiera incluían el nombre de Giménez Abad y, además, el atentado fue perpetrado mucho tiempo después de que fueran detenidos.

"Es un asunto que no se va a dejar de investigar porque no ha prescrito", han señalado las fuentes de la Fiscalía, que destacan su intención de pedir la reapertura de la causa para Pla con objeto de pedir a Francia su entrega por ese atentado.

El pasado 21 de agosto, el juez Ismael Moreno, en sustitución de Pedraz por encontrase este de vacaciones, ordenó la reapertura de esta causa para pedir a Francia la entrega temporal del dirigente etarra Mikel Kabikoitz Carrera Sarobe para investigar su presunta implicación en la muerte de Giménez Abad, después de que su hijo Borja lo identificara como su asesino.

Por el momento, Pla está procesado en la Audiencia Nacional en la causa en la que se ha investigado al colectivo de apoyo a los presos de ETA, Halboka, en el que, según el auto de procesamiento, empezó ejerciendo una función más "administrativa" y se dedicaba a "picar" (pasar a máquina) los informes de los presos.

Sin embargo, en 2008 "llegó a contactar directamente con la cúpula del aparto político de ETA", momento en el que se convierte en el "enlace directo" de Halboka con el Frente Jurídico, liderado por la abogada Arantza Zulueta, por lo que está procesado por un delito de pertenencia a organización terrorista en grado de dirigente. 

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