Rajoy redoblará su presencia en Cataluña para tratar de amarrar el voto indeciso
El presidente participará en actos del PPC los tres últimos días de campaña -- Los populares propagan la idea de que los votos a C's pueden dar escaños a la CUP
Garcia Albiol sopla las velas del pastel de su cumpleaños, en presencia de Mariano Rajoy, Marisa Xandri, líder del PP de Lleida, y Dolors Montserrat.-ACN
Mariano Rajoy echará el resto al final de la campaña para captar los votos de los catalanes no secesionistas indecisos. El PP ha detectado que en las últimas convocatorias electorales, al menos en las dos generales, un porcentaje alto de la población decició qué papaleta depositar en las urnas 'in extremis', y prevé que en Catalunya pase lo mismo. De ahí que el partido conservador haya decidido incrementar la presencia de su líder en la recta final, con actos electorales los días 17, 18 y 19 de diciembre.
El primero de los días Rajoy recalará en Salou (Tarragona) acompañado de la plana mayor del PP, todos los integrantes de su comité de dirección más la mayor parte de los barones, y se quedará en Catalunya hasta el cierre de campaña, el próximo martes.
Aún no está del todo cerrada su agenda, pero su equipo tiene claro que visitará Girona y quizá también Lleida, con el fin de trasladar el mensaje de que el verdadero "voto útil" en el bloque constitucionalista es al PP. Según han difundido este miércoles fuentes conservadorras, en las provincias pequeñas, pese a que Ciudadanos encabece algunas encuestas, a la hora de repartir los últimos escaños, debido a la ley L'Hont, las papeletas que vayan al partido naranja podrían acabar beneficiando a la CUP.
De hecho, el PPC ya está transmitiendo esta idea, con el reparto de propaganda electoral en Girona con el siguiente mensaje: "El que saque más votos de los dos se llevará el último escaño. ¿Cuál quieres que sea? ¿PP o CUP?".
Sin ataques directos a C's
Si bien, más allá de las apelaciones al voto útil, es poco probable que los conservadores incrementen los ataques directos a C's, porque han detectado que los catalanes penalizan los rifirrafes entre los partidos no independentistas. En la campaña de las generales de junio del 2016, los populares sí avisaron, en una decena de provincias, de que los votos a la formación liderada por Albert Rivera podría beneficiar a Podemos.
Pero ahora quieren que cale la idea entre los votantes pero es poco probable que sean explícitos en sus arengas, más allá de subrayar, como han hecho hasta ahora, que la lista encabezada por Inés Arrimadas carece de experiencia.
Además, el PP teme que Carles Puigdemont, que según sus sondeos internos va al alza, reaparezca en Catalunya o al menos en la frontera como broche final de la estrategia electoral de JxC. El incremento de la presencia de Rajoy responde, por tanto, también al intento de los conservadores de contrarrestar los posibles pasos del 'president' cesado.