CAMINO DE LA INVESTIDURA
Junqueras pide a Puigdemont "realismo" y alianzas "más transversales"
El exvicepresidente rechaza la opción de bloquear la investiduras para forzar unas nuevas elecciones
Oriol Junqueras, en una imagen de archivo.-GABRIEL BOUYS (AFP)
La jornada de presión independentista a Carles Puigdemont para que no bloquee la investidura se ha remachado a última hora de la tarde con un llamamiento del exvicepresidente del Govern Oriol Junqueras. En un artículo en el diario 'Ara' desde la cárcel de Estremera, el líder de ERC ha reclamado al conjunto del secesionismo que afronte con "realismo imprescindible" las dificultades actuales, al tiempo que ha advertido de que serán necesarias "alianzas más transversales", en un claro guiño a los 'comuns'.
"Hemos de ser muy conscientes, tener los pies en el suelo y enfrentarnos a las dificultades con un ejercicio de realismo imprescindible, sabiendo que estamos ante una lucha por los derechos civiles y políticos. O nos hacemos fuertes y buscamos alianzas más transversales y ensanchamos el perímetro, o nos podemos encontrar con una política de bloques que el Estado tiene mucho interés en perpetuar y potenciar", ha afirmado Junqueras tras apostar por un Govern "fuerte, estable y de amplio espectro, en la medida que sea posible".
MIRADA A LARGO PLAZO
En el mismo sentido, el dirigente republicano ha subrayado la necesidad de que los independentistas se esfuercen en "deshacer la dinámica" impuesta por el Gobierno de Mariano Rajoy, y que no tengan "miedo a decir alto y claro que más que pasos rápidos necesitamos pasos seguros y sólidos". "No debemos tener miedo ni pesar a tener una mirada a medio y largo plazo. Estamos en una carrera de fondo", ha zanjado.
Sobre la tentación de bloquear la constitución del Parlament, Junqueras desaconseja por completa esta hipótesis: "Abocarnos a nuevas elecciones es un escenario que perpetúa el 155 y que no soluciona nada, sino que nos debilita como país y como sociedad. La prioridad de los demócratas debe ser, en primera instancia, recuperar el control democrático de las instituciones, empezando por la Mesa del Parlament, tejiendo complicidades y escenificando los consensos más amplios posibles. Me parece lo más sensato, responsable y eficaz".