FIESTA NACIONAL ESPAÑOLA
La crisis catalana y el aniversario de la muerte del piloto polarizan el 12-0
El Día de la Hispanidad llega en un momento de gran tensión política por el ultimátum de Torra y de tristeza por el recuerdo del militar accidentado el año pasado
La festividad del Día de la Hispanidad se presenta este año cargada de tensión política y de amargos recuerdos, ya que se cumple el primer aniversario de la muerte del capitán Borja Aybar en aquel terrible accidente que sufrió tras participar en el último desfile militar del 12-O. La crisis catalana y el ultimátum lanzado por el president del Govern, Quim Torra, al Gobierno central con la amenaza de no apoyar sus Presupuestos flotarán en el ambiente de una jornada marcada por la simbología patria. Pero en el plano emocional, nadie podrá olvidarse del fatal suceso que tiñió de tragedia la celebración del año pasado.
El propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se apresuró a aparcar las preocupaciones políticas para primar el aspecto sentimental de este 12 de octubre, al reconocer que la Fiesta de la Hispanidad tendrá en esta ocasión sentimientos encontrados por el aniversario de la tragedia. En su emotiva visita del miércoles a la base aérea de Los Llanos (Albacete), a la que pertenecía el infortunado militar, Sánchez agradeció la labor "exigente" que desempeñan los profesionales del Ejército del Aire de esta unidad.
Al margen de este triste aniversario, la ausencia de los representantes de los partidos nacionalistas y de las formaciones más izquierdistas volverá a ser comentada en los corrillos políticos que se suelen formar durante la recepción de los Reyes. Uno de los primeros en excusar su asistencia fue el secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, que volverá a faltar este año a los actos para conmemorar la Fiesta Nacional del 12 de Octubre. El líder de la formación morada no acudirá ni al desfile militar ni a la recepción que protagonizarán posteriormente los Reyes en el Palacio Real.
A medio gas
Pero Podemos sí estará presente en el desfile militar con una delegación de perfil más bajo, al igual que hiciera por primera vez el año pasado. En esta ocasión estará conformada por la dirigente de Podemos y vicepresidenta cuarta de la Cámara Baja, Gloria Elizo, y el portavoz de Defensa en el Congreso, Juan Antonio Delgado.
Al igual que hizo en los tres últimos años, Iglesias ha declinado la invitación de los Reyes con el argumento de que el papel de su partido es estar "con la gente", trabajando por "la defensa de los derechos y la justicia social en este país", y no en celebraciones "comiendo canapés".
Los que sí estarán presentes son el presidente de la Comunidad de Madrid, Ángel Garrido, y la alcaldesa de la ciudad, Manuela Carmena. Garrido asistirá por primera vez a los actos con motivo de la Fiesta Nacional en calidad de presidente autonómico tras sustituir en mayo a Cristina Cifuentes, que acudió a las dos ediciones anteriores ataviada con complementos estampados con la bandera de España.
Tras sorprender con un paraguas gigante de la bandera nacional en el desfile del 2016, Cifuentes lució el año siguiente un bolso de mano rojigualda con sus iniciales en el centro. Garrido ya apareció con un lazo rojigualda en la solapa en el debate sobre el estado de la región del pasado septiembre.
Movilización catalana
El Día de la Hispanidad se celebrará también en las calles barcelonesas gracias a la manifestación convocada por el movimiento cívico Espanya i Catalans bajo el lema 'Barcelona, garante de la Hispanidad', en la que participarán más de 150 asociaciones, entidades civiles y plataformas cívicas. La marcha comenzará a las 11.00 horas en el cruce entre Paseo de Gracia y calle Provenza para después avanzar hasta plaza Catalunya, donde concluirá la celebración sobre las 12.00 horas con los discursos de los representantes de algunas de las asociaciones asistentes.
El PP de Catalunya se ha encargado de calentar el ambiente con su iniciativa de repartir 20.000 lazos con la bandera de España y Catalunya. "Este lazo simboliza la realidad de la sociedad catalana con las banderas de Cataluña y España entrelazadas como símbolo de unión frente a aquellos lazos que se pretenden la confrontación promovidos por el independentismo", ha asegurado el presidente del Grupo Popular en el Ayuntamiento de Barcelona, Alberto Fernández, antes de añadir: "Aquellos que nos sentimos catalanes y españoles ni nos vamos a callar, ni nos vamos a quedar de brazos cruzados frente un independentismo que despliega lazos y esteladas en espacios públicos de toda Catalunya.
Por su parte, la Plataforma Antifeixista de Barcelona también se concentrará a las 11 horas en los Jardines de Salvador Espriu (Jardinets de Gràcia) con la siguiente consigna: 'L'antifeixisme és cosa de totes' ('El antifascismo es cosa de todas'). A esta convocatoria se han sumado los comitès de defensa de la república (CDR) de la ciudad.
Balcones rojigualdas
Ya a nivel estatal, el PP ha lanzado en las redes sociales la campaña 'España en tu balcón' animando a la gente a que exhiba la bandera española en su casas con motivo del 12-O. El secretario general de ese partido, Teodoro García Egea, explicó que su formación quiere "normalizar" el uso de los símbolos nacionales y la bandera de España "representa a todos". "Queremos animar al resto de fuerzas políticas a que se unan a esta campaña", resaltó para añadir que los "enemigos" de la unidad de España saben lo "importante" que son los símbolos y por eso "se colocan lazos amarillos" e "insultan al Estado de derecho".