CAPILLA ARDIENTE
El mundo de la política y de la cultura despiden a Carmen Alborch
Personalidades de diferentes ámbitos ensalzan su sonrisa, su lucha por la igualdad y su capacidad de trabajo
El mundo de la política y de el de la cultura, y una amplia representación de la sociedad valenciana, despidieron este jueves a la exministra Carmen Alborch, que falleció víctima de un cáncer el miércoles a la edad de 70 años, y lo hicieron recordando la sonrisa que siempre lucía pero también su lucha por la igualdad y su capacidad de trabajo.
José Guirao, ministro de cultura, ha estado en el Tanatorio Municipal de la capital valenciana, y ha explicado que eran amigos desde hace casi 30 años y que le llamó para formar parte de su equipo cuando fue nombrada ministra en 1993.
"Su mejor legado es haber sabido estar en la política de una manera que no se practica. Se habla mucho de su sonrisa, que era como un abrazo. Era conciliadora, sabía escuchar, entender al que tenía enfrente compartiera o no sus ideas y siempre buscaba el punto de encuentro", ha dicho.
"Era una trabajadora infatigable que buscaba la empatía para construir algo, era muy constructiva. Si tuviera que definirla con una palabra diría que era muy generosa", ha afirmado el ministro, que con ella fue director del Reina Sofía.
"Era una delicia trabajar con ella. Era muy seria, incansable pero entendía tus carencias o tus fallos. Fue mi jefa pero no fue mi jefa, era mi amiga y esa amistad ha durado hasta el último momento", ha constatado emocionado.
"Herencia maravillosa"
Guirao ha coincidido con Ximo Puig, presidente de la Generalitat, que ha estado acompañado del escritor Fernando Delgado, diputado autonómico del PSPV en Les Corts.
Puig ha asegurado que Alborch deja "una herencia maravillosa que habla de sus convicciones en favor de la igualdad, el feminismo y de aquellos que más dificultades tienen en la vida" y ha destacado su "modernidad" y su "mentalidad abierta" pero también sus "profundas raíces" valencianas.
"Fue siempre avanzada y abrió muchos caminos y espacios de libertad", ha señalado el president que ha dicho que ha sido "una persona excepcional" y ha recordado que "ni en los momentos más difíciles dejó de sonreír".
Combatir la crispación
De su sonrisa ha apuntado Enric Morera, president de Les Corts que era "necesaria para combatir la crispación en la política" sin dejar de defender con firmeza unas ideas y la consellera Ana Barceló ha destacado que la compaginaba con "su lucha por la igualdad y por el feminismo, que impregnaron el socialismo valenciano" y la exministra Carmen Montón ha recalcado que estaba "enmarcado en rojo".
"Es una maestra, imprescindible para el feminismo. He compartido campañas y trabajos y tengo la impresión de que nos quedamos un poco huérfanos. La vamos a echar mucho de menos. Hasta el último minuto ha defendido la lucha, la esperanza y la alegría. Defendía la felicidad dentro de la política", ha apuntado.
También han acudido Vicent Marzà, consejero valenciano de cultura y miembro de Compromís, o el actor y dirigente de Ciudadanos Toni Cantó, que ha asegurado que será unánimemente recordada porque ha sido parte de la vida cultural y política nacional, y numerosas personalidades del ámbito cultural valenciano, e Isabel Bonig, presidenta del PPCV.
Profesora de Juan Roig
Ya el miércoles por la tarde numerosos políticos, agentes culturales e incluso empresarios acudieron al domicilio familiar de Alborch. Entre ellos estuvo Juan Roig, dueño de Mercadona, que desveló que la exministra, que fue la primera mujer en ser decana en la Facultad de Derecho, fue profesora suya en Económicas y destacó que era una gran personas y tenía una "grandísima personalidad".
Tanto el Congreso de los Diputados como Les Corts han guardado esta mañana un minuto de silencio en su memoria y estar tarde tendrá lugar un funeral privado.