El exdiputado de Putin que se vio con Terradellas, dispuesto a declarar ante la justicia española

El exdiputado del partido oficialista Rusia Unida y politólogo Serguéi Márkov está dispuesto a responder a cualquier pregunta de la justicia española sobre sus contactos con el presidente de CATmón, Víctor Terradellas, investigado por presuntas subvenciones ilegales al procés.

"Si el Fiscal General (sic) tiene preguntas, puede enviar fácilmente un representante a Moscú y podemos reunirnos con él, por ejemplo en la embajada española. O teóricamente si ellos están interesados puedo ir a España para responder todas las preguntas", dijo a Efe Márkov.

El nombre de Márkov, profesor de la Universidad Estatal de las Relaciones Internacionales de Moscú (MGIMO) aparece escrito en una libreta confiscada por la Policía Nacional durante el registro de la sede de CATmón en mayo del 2018, según informó el diario El Periódico.

DISPUESTO A DAR RESPUESTAS

El politólogo aseguró además que ha enviado a través de su asistente un correo electrónico al embajador español en Rusia, Fernando Valderrama, en la que le ofrece ir a la legación para "explicar" sus encuentros con el exsecretario de Relaciones Internacionales de Convergencia Democrática de Cataluña (CDC) "y responder a todas las preguntas".

En el correo electrónico, siempre según Márkov y su equipo, el analista político solicita en concreto una reunión o una conversación telefónica con el embajador, ya que "su nombre aparece repetidamente en medios españoles en vista de sus contactos con algunos líderes del movimiento por la independencia de Cataluña".

LAS REUNIONES

Por otra parte, Márkov ha explicado este lunes en el Ministerio ruso de Asuntos Exteriores "todos los detalles de los que tengo conocimiento" sobre las reuniones con Terradellas en 2017 en "la cúspide de la crisis" catalana y en las que éste trató de recabar el apoyo ruso a la declaración unilateral de independencia (DUI), según el exdiputado de Rusia Unida.

"Preguntaron qué haría el Gobierno ruso si el nuevo Gobierno catalán reconociese la pertenencia de Crimea a Rusia", explicó el analista político, aún cercano al Kremlin.

De acuerdo con Márkov, él transmitió a sus interlocutores que él no era un funcionario y que tenían que preguntar al Ministerio de Asuntos Exteriores y que él como experto pensaba que Rusia "no estaría interesada" en este planteamiento del reconocimiento de Crimea a cambio del apoyo ruso a la independencia de Cataluña.

Una de las razones por la falta de interés de la parte rusa es que con el reconocimiento de los crimeos de su pertenencia a Rusia a través de un referéndum y de la propia Rusia "es suficiente".

Otra, según Márkov, es que "Rusia realmente respeta la política interna de otros países". "Son los valores de Vladímir Putin no intervenir en la política interna, incluido en España", añadió.

Putin ha recalcado en varias ocasiones que la crisis catalana es "un asunto interno de España y debe ser resuelto en el marco de la legislación española, de conformidad con las tradiciones democráticas".

También dijo que no facilitó ningún contacto del Kremlin a Terradellas y que "por supuesto no es un enviado" del presidente ruso, quien "nunca" le pidió reunirse con "ningún político catalán, español o europeo".

¿GRUPOS ESPECIALES RUSOS EN CATALUÑA?

Sobre la investigación de un juez de la Audiencia Nacional de los movimientos en Cataluña de un grupo militar de élite ruso de la denominada Unidad 29155, a la que se vincula con supuestas maniobras de desestabilización en Europa, como adelantó el diario "El País", Márkov opinó que no había razones para enviar una unidad especial en esa región, porque "Rusia allí no interviene".

Al mismo tiempo señaló que si una crisis se agrava "por supuesto las unidades especiales reciben la recomendación" de desplegarse rápidamente en una región, al igual que los espías de otros países, a fin de "recabar la máxima información posible".

"El presidente ruso tiene tres formas para ser informado de lo que pasa, por ejemplo, en España: el cuerpo diplomático, el servicio de inteligencia y el servicio de inteligencia militar. Es su trabajo encontrar información y enviarla a Moscú. Si no lo hacen se les despide", consideró.