Sánchez transmite a Torra que hay que "retomar el diálogo" y "arreglar el conflicto"

Pedro Sánchez y Quim Torra han mantenido este jueves una conversación "cordial" de siete minutos. La llamada, que se produce después de que el jefe del Ejecutivo levantase el veto al 'president' de la Generalitat, ha servido para que ambos mandatarios se comprometieran a un encuentro, en Madrid o en Barcelona, después de que el líder socialista haya nombrado a sus ministros, algo e la Moncloa confía en que tenga lugar a mediados de la semana que viene. Al mismo tiempo, 15 días después de la formación del Gobierno central también debería la mesa sobre el "conflicto político" en Cataluña, pactada entre el PSOE y ERC a cambio de la abstención de los republicanos en la investidura de Sánchez.

La Moncloa y la Generalitat han emitido comunicados muy similares sobre el contenido de la conversación. Según el Gobierno central, el líder socialista ha transmitido a Torra que "quiere recomenzar y retomar el diálogo" y que "tiene la voluntad sincera de intentar arreglar el conflicto político en Cataluña". El Govern ha puesto énfasis en que la reunión entre Sánchez y Torra debe servir para "encarrilar la mesa de negociación", un organismo que hasta ahora JxCat había recibido con tibieza.

La anterior ocasión que hablaron fue el pasado 17 de diciembre, una conversación de quince minutos que sirvió para normalizar la relación tras meses de silencio en los que el jefe del Ejecutivo no respondió a las llamadas del 'president', molesto porque a su juicio no había condenado de forma inequívoca la violencia desencadenada en las calles de Barcelona como reacción a la sentencia del 'procés'. En la charla de diciembre, ambos dirigentes acordaron reunirse. Torra pidió que fuese lo antes posible. Sánchez se comprometió al encuentro, pero lo fijó para después de una investidura lograda tras un pacto con ERC que creaba la mesa  en la que el Gobierno y la Generalitat se sentarán para tratar de encauzar el "conflicto político" catalán. 

Sánchez y Torra se han citado en otras dos ocasiones. La primera, en la Moncloa, al poco de que el socialista llegase a la presidencia tras la moción de censura. La segunda, en Barcelona, en diciembre del 2018, que alumbró la declaración de Pedralbes, que apostaba por el "diálogo efectivo" para resolver el conflicto. La voluntad de concordia se desvaneció cuando PDECat y ERC presentaron sendas enmiendas a la totalidad a los Presupuestos la misma semana en la que se produjo la crisis del relator. Sánchez adelantó las elecciones generales y empezó una campaña especialmente dura contra el independentismo.