Junqueras: "Me muero de ganas de negociar"
El líder de ERC se define como "escéptico" con el PSOE y "entusiasta" de la mesa entre gobiernos
Sonriente y levemente afónico. De buen humor. Oriol Junqueras compareció este martes en la comisión de investigación sobre la aplicación del artículo 155 de la Constitución sobre la autonomía catalana. Pero este fue solo el motivo formal. Junqueras ha preferido pensar en clave de futuro a mirar atrás. Me muero de ganas de dialogar, afirmó.
La intervención de Junqueras, en una comisión con la ausencia de PSC y PP, fue poliédrica. Se mofó de Ciudadanos, denunció al Estado y a sus cloacas, proclamó su particular ho tornarem a fer. Pero de fondo, siempre, el diálogo. No hemos renunciado a la voluntad de diálogo, y lo hemos intentado del derecho y del revés. Estamos encantado de dialogar con todos, con los que han aplaudido de manera más entusiasta nuestro encarcelamiento, también, señaló a lo largo de su intervención. Nuestra cárcel es poco relevante al lado de los intereses del país. No condicionaremos el diálogo a nuestra condición de privación de libertad.
Sinceridad y Estado
Reconoció Junqueras su escepticismo con el PSOE por lo mucho que ha defraudado las expectativas de los catalanes, aun así, mostró de nuevo su entusiasmo por la mesa de diálogo que, precisamente este martes, debía de haberse puesto en marcha, según el pacto de investidura entre republicanos y socialistas. Será difícil, muy difícil, apuntó, para sentenciar: Contra más sinceros seamos más coste tiene para el Estado no estar a la altura de esta franqueza
Sobre la represión del Estado, Junqueras advirtió de que algunos de los que aplaudieron con entusiasmo los porrazos del 1-O y la encarcelación de los políticos también catarán las cloacas del Estado y es que, para el líder republicanos, el deep state no puede evitar fabricar pruebas falsas, como él mismo vivió, dijo, en referencia la grabación en la que el entonces ministro Jorge Fernández Diaz conspiraba en su despacho contra él y su familia.
Del 155 dijo que no sirvió para nada de lo que querían, porque el independentismo, pese a la eliminación de los líderes políticos, vía cárcel o exilio no solo ha desaparecido sino que ha redoblado su fortaleza en las urnas, como demuestran los resultados del ciclo electoral del 2019, en referencia, sobre todo, a la triple victoria de ERC (dos generales y unas municipales) y de JxCat (en las europeas). En este ciclo, apuntó como dardo a Ciudadanos, los que más aplaudieron nuestra encarcelación son los que más votos han perdido hasta el punto de quedara últimos. Carlos Carrizosa, con una sonrisa no menos sardónica, asentía.
Freno a las políticas sociales
El único efecto del 155, en opinión de Junqueras, fue el freno a las políticas sociales que llevaba a cabo ese Govern, como la de la Renta Mínima Garantizada. No ha conseguido, sin embargo, disuadir al independentismo de sus objetivos. "Volveremos a ejercer el derecho a la autodeterminación", aseveró tras recordar que en los últimos 100 años ha habido 106 referéndums de autodeterminación en el mundo. "26 de ellos sin permiso del estado original".
La respuesta de Cs la dio su líder parlamentaria, Lorena Roldán. Tras una diatriba de seis minutos y sin esperar la respuesta del exvicepresidente, Roldán y Carrizosa se levantaron y se fueron. ¿Ya os vais, les preguntó Junqueras, ahora que habíamos empezado a dialogar, remachó. Luego, en su segundo turno, Junqueras incluso se permitió agradecer sin ironía que Ciudadanos hubiera asistido a la comisión, a diferencia, por ejemplo, del PSC y el PP. Es un primer paso, a lo mejor, a la próxima se quedan a escuchar la respuesta.
Junqueras también se vanaglorió de que aquellos que con más ahínco trabajaron contra el independentismo, y citó a Mariano Rajoy, Santamaria y Albert Rivera ya no están. Y yo, sí. Y estaré. La democracia les ha pasado factura. Aun será que yo prefiero mi factura, sentenció
Ni una palabra, como era de esperar, salió de su boca acerca de la polémica sobre el acta de diputado de Quim Torra. Ni una referencia. Eso sí, se dirigió a los asientos donde sus compañeros de partido seguían su intervención y les dijo: Estoy orgulloso de vosotros. De lo que hacéis y lo que decís. Entended esto como un homenaje. Junqueras sigue siendo muy florentino.