Psicología de los cerdos
Juana Largo apunta cómo los factores psicológicos y no sólo los biológicos influyen en las percepciones de género
Algunas personas, aun en este siglo XXI, arguyen, hablando del tema “trans”, que los “trans” son toros y que las vacas son vacas. Esto se supone en la taxonomía que pueda emplear un veterinario o un naturalista.
Lo que pasa es que, en la mente de una persona que, mínimamente, siga el decurso de la ciencia, se puede leer de otra forma. Los biólogos y toda aquella persona encomendada a la Ciencia, lo puede tener muy claro, en este asunto del sexo del animal que se le presente ante la vista. Aunque, aun así, en nuestros tiempos, podemos tenerlo no tan claro.
Pues no hace falta ser biólogo para saber que, tanto en los seres humanos como en los seres animales, existe un principio que nos habla de que, tampoco, en el mundo animal, es biología todo. Que hay mucha más sicología o mente de la que se cree todo el mundo. No es solo que lo diga la Iglesia, el que, en los animales, como en los humanos, hay un alma, o, si se quiere, traducido al lenguaje científico de hoy en día, que todos los seres animales tenemos alma, o sea mente, o, al menos algo que se pueda acordar en el lenguaje de la vida, como es la “sicología”.
Porque, según se deduzca de este punto, se puede colegir una cuestión u otra. Y que en el ser humano es todo la biología. Y la sicología, eso que funda edificios humanos, se hurta bajo la biología. ¡Hasta los cerdos pueden tener sicología!... No solo biología. Como quieren argüir algunas personas de los seres humanos: solo biología.
Por ejemplo, cuando algunas personas nos hablan de que el sexo es solamente algo biológico y que el comportamiento de una persona es dado por su sexo, biológico, no se repara en el aspecto sicológico (no digamos ya cultural…) del asunto. Hasta un grillo puede tener sicología. Pues, entonces, los seres humanos, a los cuales no se suele aplicar la clave de la biología como determinación de género, y sí la de la sicología, ocurre que son trasladados de la categoría meramente animal a la de los humanos. Pero no son, como se dice, biología, pues existe un alto punto de conciencia y de autoconciencia que nos dice, con la simple categoría de aplicación dada que la conciencia no es solo biológica y no meramente orgánica, puesto que hay algo, algo más allá de todo esto, y que es el carácter que nos queremos dar por convención científica y humana, que supera al animal, no solo en cuanto racional, sino en el sentido de autocomprensión de la vida humana de la cual algunas otras personas piensan que se puede dar el alma humana, tan compleja que, algunas otras personas nos hablan de un elemento divino en el ser humano.
Damos por hecho que el toro es toro y la vaca es vaca, pero que pueden salir de estas etiquetas estudiando un tanto la sicología animal y poder llegar a la conclusión de que, aunque utilicemos a los animales, sin embargo, son capaces de tener también no solo un ingrediente de alimento, por ejemplo, sino de un más allá de la mera biología.
El tema trans no se puede reducir a la mera biología, sino a la cultura en la que vive tal o cual persona. El sexo no lo hace todo por ser asignado desde niño o niña a un sexo o a otro. Es que existe la cultura –de la cual hasta incluso antes de nacer, hay ya una sicología- y no deja de ser la cultura, con sus múltiples ingredientes científicos, la que nos dice que una persona puede ser mujer habiendo nacido con sexo de macho. Y una mujer ser hombre, habiendo nacido con sexo de hembra. E incluso que un trans puede haber nacido mujer y vivir con sexo de macho y no conforme con su sexo y ver que hay posibilidades de cambiarlo en lo posible por una simple ley que reconoce como mujeres a los trans, para que no estén marginados y humillados como quieren los defensores de la nación biologista.
Pero, hay que añadir otra cosa: una mujer trans puede haber nacido con particularidades físicas de mujer, aunque tenga sexo de macho, y por lo tanto adecuada para el sexo femenino. Las variantes pueden ser múltiples y, ahora, en lo que estamos, el concepto de genética también se puede atribuir a la biología y no solo a la sicología. Y si estamos hablando de cultura, en la cual lo trans entra, en la cual entran todos los componentes tanto biológicos como sicológicos, añadiendo la cultura, estamos hablando ahora con adaptación a la ciencia y al nivel de comprensión de libertad y no solo determinación de los seres humanos. No es serio si no es así.