La Solana
El astrónomo Noherlesoom y la política soriana
EL PRIMER hombre del tiempo, o al menos el primero de fama nacional, fue Francisco León Hermoso (1843-1897), un palentino nacido en Santa Cecilia del Alcor, que entre 1890 y 1897 publicó la revista quincenal el Boletín Meteorológico con las predicciones del tiempo. Pronosticar sol o lluvia en esa época era muy complicado. La Meteorología estaba en pañales y a duras penas lograba, gracias al telégrafo, anticipar alguna tormenta, pero Noherlesoom, que ese era el seudónimo con el que firmaba el palentino, se atrevía a hacer predicciones de 15 días y lograba los suficientes aciertos para ganar fama. Aunque la prensa lo mencionaba como astrónomo, no había cursado estudios y lo que tuviera de científico lo había obtenido como autodidacta. Presumía de un método que nunca desveló. Pudo ser un farsante o un adelantado a su tiempo y quizá de alguna forma había conseguido un rudimentario modelo meteorológico de los que en la actualidad se puede aplicar gracias a los ordenadores. En la política, también se pueden predecir tormentas, sin método, aunque la experiencia cuenta. En El Burgo de Osma, en Soria, llevan ya años de enfrentamientos en el Partido Popular, que ha recuperado el bastón de mando municipal pero debe haber como mucho un afiliado en el equipo de gobierno. Las relaciones entre el PP con sede en la capital soriana y sus representantes municipales en El Burgo son de abierta hostilidad desde que se dejó a la villa episcopal sin representación en la Diputación. El presidente de la Diputación, Benito Serrano, no es muy bien recibido por el alcalde, Antonio Pardo, que si puede evitar que vaya de visita, al menos lo intenta. Esas malas relaciones parece que liberan al alcalde para reclamar a la Junta el prometido y ansiado nuevo centro de salud o para agradecer públicamente a la delegada del Gobierno en Castilla y León su apoyo al municipio. Puede también que eso tenga sus contrapartidas, porque este año el colegio del pueblo se ha quedado sin la subvención que aprueba la Diputación y que el Manuel Ruiz de Zorrilla había venido recibiendo en los últimos años para labores de mantenimiento, aunque puede ser casual. Todo eso parece provocar un enfrentamiento entre burgenses y sorianos que nunca ha existido. O sí. En septiembre de 1989, el Noticiero de Soria, en un artículo, que casualmente citaba a Noherlesoom, denunciaba animadversión de los burgenses hacia la capital, porque el semanario de El Burgo Los Apuntes, había pedido control y cuarentena para los viajeros que llegaran a la villa desde la capital, pues se registran hasta cinco muertos diarios por viruela. Los Apuntes acabó reconociendo que la noticia era falsa y se defendía como podía contra la dureza de El Noticiero, aunque poco más podía recriminar que su tono, haber confundido el gentilicio burgense con burgalés y el error malicioso de decir que en El Burgo no había alcantarillado. Cosas del pasado, pero hoy en día Noherlesoom anunciaría más borrascas políticas.