SOCIEDAD
'Me gustaría casarme en Soria'
Nos recibe en el Palacio de los San Clemente del centro de Soria. Una empleada con acento ruso nos invita a pasar al jardín de la vivienda y a acomodarnos en las sillas que rodean una de las cuatro mesas. Los árboles se distribuyen sin orden en un patio donde campa a sus anchas un perro al que no preocupa nuestra visita. Son las 17.30 horas y Álvaro de Marichalar hace aparición por una de las puertas de la derecha. Llega con media hora de retraso sobre el horario que habíamos fijado. A cambio, su flamante novia de 22 años y origen ruso, Ekatheryna Anikieva, trae tres vasos, otras tantas servilletas y una botella de agua para que nos encontremos como en casa. No en vano, este navarro de nacimiento viene a su Soria de adopción «una vez cada quince días y en Semana Santa y Navidad».
La conversación comienza con un exhaustivo análisis de su vivienda y de los San Clemente, «una de las doce familias que fundaron la ciudad», de la «muralla que sirvió de defensa» y que aún se mantiene en pie y continúa con el resumen histórico de la «historia amplia de Soria». Aunque conservar «esto nos cuesta mucho esfuerzo y mucho dinero, merece la pena», matiza.
En esas mismas paredes que ahora muestra con orgullo, Marichalar se «crió» y pasó toda su juventud «de una manera dura porque aquí no teníamos calefacción y hace un frío que pela».