«Estamos ante una generación perdida»

El asesor económico de Aznar, y director de la Oficina Presupuestaria de la Presidencia del Gobierno durante su primera legislatura, pasa estas vacaciones en Soria, «lugar al que veníamos hace años cuando nuestras hijas eran pequeñas y al que desde hace tres años he vuelto con mi mujer todos los veranos, por el buen clima que se da». No obstante se mantiene al corriente de los constantes vaivenes  que los mercados han sufrido en los últimos días «frente a lo que hace falta una regulación a nivel europeo y no que cada país actúe por su cuenta». Se muestra cauto a la hora de dar la receta para salir de la crisis «porque nadie sabe lo que hay que hacer».

 

Pregunta.- ¿Cuándo se empezarán a ver realmente los brotes verdes?

 

Respuesta.- Es complicado decirlo porque las cosas se están complicando cada vez más. El año pasado la Unión Europea exigió a los países miembros tomar medidas para reducir el déficit. De un superávit que teníamos del 2% del PIB hemos llegado con la crisis estructural a un déficit del 12% del PIB, hasta que Europa nos llamó la atención. El año pasado la reducción fue al 9% y este año se espera  que sea del 6%, algo que creo muy difícil de conseguir, ya que el crecimiento de la economía europea es prácticamente nulo. Creo que la crisis durará de cinco a 10 años si se toman medidas estructurales ya, con un ajuste muy fuerte, no sólo reducir el gasto público, y esto no se ha empezado a hacer. En el tratado de la unión estaba establecido que no podía pasarse el déficit del 3%, y nosotros llegamos al 12%, que fue cuando nos llamaron la atención.

 

P.- Algunos econmistas son más apocalípticos. Dicen que hay que refundar el sistema y que no volverá a ser lo que era.

 

R.- Esto es difícil de saber, pero yo creo que pasar de un sistema capitalista como el que existe en EE UU, que ha tenido una fuerte repercusión en la economía mundial, a otro tipo de sistema de economía dirigido por el poder público no es la solución. Una economía dirigida por el poder público nos puede llevar a una situación peor como ocurrió en todos los países del este. Hoy en día los mercados están muy descentralizados y esta no es la situación que había en Rusia, donde la economía estaba totalmente centralizada, y puede durar 20 o 30 años, pero al final ha ido avanzando a una economía de mercado totalmente liberalizada.

 

P.- Entonces ¿podemos caer en una generación perdida?

 

R.- Eso sí, en una generación perdida a escala mundial. Tendremos que sufrir una etapa muy difícil de jóvenes que no van a encontrar futuro. A pesar de ser una generación bastante bien preparada va a encontrar muchas dificultades en encontrar un empleo a nivel general. Se espera un paro sostenido en torno a los cinco millones de personas.

 

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