El comisario reclama ampliar la plantilla con 50 policías ante la apertura de la cárcel

El comisario jefe del Cuerpo Nacional de Policía, Juan José Fernández Ibáñez, anunció ayer que, cuando se produzca la apertura del nuevo Centro Penitenciario de Soria, necesitarán reforzar la plantilla con la llegada de medio centenar de policías, agentes que se sumarán a los 130 profesionales que hay en la actualidad.

 

«Hemos pedido 50 funcionarios más», precisó Ibáñez, que matizó que «todo dependerá de las revisiones de Hacienda», que es el organismo que «tiene que aprobar el catálogo de puestos de trabajo». Con su incorporación se logrará hacer frente al aumento de la carga de trabajo que tendrá la Policía Nacional en actuaciones como, por ejemplo, custodiar a presos o realizar traslados. 

Además  recordó que, para ese momento, «la comisaría» actual «no va a tener capacidad para el incremento de funcionarios». En ese sentido, el comisario reivindicó la necesidad de crear una nueva comisaría que aglutine a los agentes de la Policía Local y de la Policía Nacional. «Entiendo que ahora son momentos de dificultades económicas», reflexionó Ibáñez, pero «espero que se pueda retomar» pronto el proyecto y ser una realidad. 

El comisario realizó estas declaraciones ante los medios de comunicación instantes antes de que comenzara el acto de celebración de los Santos Ángeles Custodios -patrón de la Policía Nacional-, ceremonia que se celebró en el centro cultural Gaya Nuño.

Allí estuvo arropado por el subdelegado accidental del Gobierno, José AntonioTejero, que apuntó que «no hay novedades» en la creación de la nueva comisaría, y recordó que «queda pendiente que el Ayuntamiento de Soria ponga a disposición del Ministerio de Interior la parcela adecuada». 

El acto, que comenzó a las 13.00 horas, sirvió para reconocer la trayectoria profesional y el buen hacer de una docena de funcionarios. Concretamente se hizo entrega de un diploma a Julian García, Miguel Antón,Cipriano Lafuente, Florentino Ballesteros y Antonio González, todos ellos agentes que se jubilaron recientemente. Además, se destacó el trabajo de Roque Arranz, a quien se concedió una placa conmemorativa por su dilatada experiencia. 

Protagonista

El protagonista de la velada fue sin duda el agente José Ignacio del Barrio, un policía que recibió por primera vez en la historia de la Comisaría de Soria la cruz con distintivo rojo. El agente recibió este reconocimiento porque el pasado mes de febrero puso en riesgo su vida para salvar la salud de una persona que se encontraba en el río Duero.

El premio se concede a los agentes que realizan un acción de alto valor, en circunstancias de peligro para su persona, con utilidad para el servicio o prestigio para el Cuerpo. El comisario de Soria recordó que «es una medalla muy especial» y añadió que «estoy muy contento porque es un funcionario ejemplar». 

Además,  durante el acto otras cinco personas más fueron condecoradas. Concretamente fueron Domingo Martín, Carlos Carazo, Óscar García, Miguel Ángel Pascual y Luis Bueno, que recibieron la cruz con distinción blanco. 

El subdelegado delGobierno recordó que «la fiesta del Cuerpo Nacional de Policía sirve» para «manifestar el reconocimiento de la sociedad por el trabajo abnegado» y continuo que realizan «estas personas durante todo el año». Además defendió que se trata de «un colectivo que, si por definición cualquier funcionario público está al servicio de la comunidad, eleva ese servicio a un nivel superior». 

Tejero recordó que «los policías nacionales son un ejemplo» a seguir y recalcó que «están para garantizar el libre ejercicio de las libertades y derechos que reconoce la Constitución, para preservar nuestra tranquilidad, proteger a los más desvalidos y perseguir la delincuencia»

En alusión al índice de delitos que tiene la provincia, afirmó que «seguimos en menos de 30 infracciones penales por cada 1.000 habitante y año», estadística que sitúa a Soria como uno de los lugares más seguros de España. «Especialmente en capitales de provincia», añadió Tejero, «es un índice muy satisfactorio». En su opinión, «si la ciudad es una de las más tranquilas es en buena medida gracias al trabajo diario» de los agentes de la Policía Nacional. 

El subdelegado accidental delGobierno en Soria aprovechó la ocasión para hablar de las investigaciones que se están impulsando para encontrar a los promotores de la acampada ilegal de Pinar Grande. Tejero afirmó que «tan pronto como haya novedades las comunicaremos con mucho gusto». Casi dos meses después de la celebración de esta macrofiesta ilegal, todavía no se ha producido la detención de los organizadores.