SOCIEDAD
La Seguridad Social sólo adjudica tres de cada diez subastas que hace
La Tesorería de la Seguridad Social ha realizado desde el año 2008 y hasta la fecha 82 subastas, incluyendo las de bienes muebles e inmuebles. De total de pujas organizadas, sólo se han adjudicado el 30%, según se desprende de cifras facilitadas por la Subdelegación del Gobierno. Lo que significaría que sólo tres de cada diez subastas encuentran adjudicatario.
Este porcentaje de adjudicaciones baja si sólo se contabilizan las subastas de bienes inmuebles, es decir, casas y pisos, las más habituales, y también fincas. Durante los años de la crisis, sólo el 22% de estas subastas han resultado adjudicadas.
Del total de subastas convocadas desde 2008, el 40,2% han quedado desiertas, mientras que el 20,7% fueron suspendidas por pago, según las citadas fuentes.
La normativa marca que debe haber tres licitaciones del bien, tanto si se trata de un bien mueble como de un inmueble. Así, se fija un día para la subasta en el que el bien sale al precio tasado. Esta primera licitación suele quedar desierta, habida cuenta de que muchos de los bienes que se subastan no suelen despertar mucho interés, explican fuentes de la Subdelgación.
La Seguridad Social vuelve a sacar el bien en una segunda licitación en esta misma subasta en el caso de que en la sala haya personas interesadas. Así pues, se inicia el proceso de nuevo, después de un pequeño margen de tiempo, con una rebaja del 25% en el precio de salida del bien. Si esta subasta queda desierta porque nadie puja, se convoda otra subasta donde el bien, ya en tercera licitación, sale a la mitad de precio: a un 50% del tipo de tasación inicial.
También existe otra posibilidad, que es potestativa del director provincial: si se encontrase algún postor interesado, se podría reducir el precio por debajo de este 50% y la Seguridad Social haría una adjudicación directa a esa persona.
Embargo de vehículos
En el caso de los bienes inmuebles, la mayoría de las subastas suelen quedar desiertas, pero la Tesorería no levanta el embargo sobre el bien a la espera de nuevas licitaciones posteriores. Cuando se trata d
e bienes muebles (especialmente vehículos que es un bien que se subasta con cierta frecuencia) resulta más fácil adjudicar el bien. No obstante, si no se pudiese adjudicar, se levanta el embargo y se vuelve a poner a disposición del deudor.
Por ejercicios, de las 12 subastas convocadas en el del 2008 (diez inmuebles y dos muebles), cinco fueron suspendidas por pago, mientras que cuatro resultaron desiertas, y únicamente en tres casos se pudo adjudicar el bien. Al año siguiente, la Seguridad Social convocó 15 subastas, de las cuales seis lograron ser adjudicadas. Cinco pujas resultaron desiertas y tres fueron suspendidas por pago, según las cifras facilitadas por la Subdelegación.
2010 fue el año con más subastas convocadas, un total de 28, de las que casi la mitad quedaron desiertas: 13. El bien subastado encontró adjudicatario en 11 ocasiones y en cuatro quedó suspendida la subasta por pago. Del total de bienes subastados, 17 eran inmuebles y 11 bienes.