Mínguez acusa a la Junta de inhibirse en la gestión de la guardería municipal

El alcalde de la ciudad, Carlos Martínez Mínguez, denunció ayer que  la Junta de Castilla y León tiene la competencia de gestionar la guardería de Santa Bárbara, y recordó que, sin embargo, es el Ayuntamiento quien está asumiendo sus costes. Además de criticar la «inhibición» de la administración regional en la gestión de este espacio, manifestó que el Consistorio no tiene responsabilidad en la situación laboral de las ocho trabajadoras, cuyos puestos están en el aire.

 

Mínguez realizó estas declaraciones ayer para matizar cuál es el estado que atraviesa este centro de educación infantil. Su futuro es un asunto de actualidad desde que el equipo de Gobierno anunciara la semana pasada que va a cambiar su modelo de gestión a partir del curso que viene. Una medida incluida dentro del plan de ajuste que ha tenido que realizar el Consistorio para poder acogerse al mecanismo diseñado por el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, para abonar los 8,2 millones que adeuda a proveedores. 

Hasta la fecha, el Ayuntamiento viene desembolsando cada año  unos 165.000 euros anuales por esta guardería. Cifra a la que hay que sumar gastos fijos como el mantenimiento. Lo que pretende ahora el equipo de Gobierno es, aprovechando que en septiembre vence el contrato que tiene vigente la empresa adjudicataria del servicio, modificar el pliego de condiciones para reducir los costes que tiene que asumir por la gestión de este espacio. Y es que aunque este servicio está externalizado desde el primer día, hay que recordar que sus precios, según manifestaron las trabajadoras del centro el lunes, son bajos y dependen de la renta de la unidad familiar. Es decir, como mucho se abonan 120 euros al mes. 

«Por la inhibición de la Junta, el Ayuntamiento está haciendo un esfuerzo importantísimo de financiar 5.000 euros por niño al año», aseveró Mínguez, quien insistió que este espacio «tendría que estar gestionado» por la administración regional.

Molesto por el uso del término ‘privatización’, el regidor soriano precisó que la guardería ha estado «desde el minuto uno» gestionada por una empresa privada, cuyo contrato vence en septiembre. Mínguez señaló que el Ayuntamiento va a seguir realizando un «esfuerzo económico» por mantener este servicio, pero recordó que al curso que viene no sólo estará operativa esta guardería, sino que también funcionará la nueva instalación que está ubicada en el polígono de las Casas.

«Buscamos optimizar los recursos municipales porque vamos a tener dos guarderías. No podemos asumir el coste de la puesta en funcionamiento de dos guarderías que tendrían que ser gestionadas por la Junta». 

Además de precisar que no le consta que nadie del equipo de Gobierno garantizara la continuidad de las ocho trabajadores de la guardería, recordó que estas empleadas dependen de la empresa adjudicataria, y no del Ayuntamiento. Por lo que su futuro dependerá de quién obtiene el próximo contrato.