Condenado el Sacyl por un ‘error’ que dejó paralítico a un paciente

El Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Castilla y León ha condenado a la Consejería de Sanidad a indemnizar con la cantidad de 185.574,38 euros, más los intereses legales, a un paciente soriano que fue operado por una hernia discal y sufrió una parálisis de la parte inferior del cuerpo debido a un «error quirúrgico».

La sala de lo Contencioso Administrativo del TSJ de Castilla y León ha estimado el recurso presentado por la representación legal de J. M. H. L., quien fue operado el 24 de junio de 2009 en el Hospital Universitario ‘Río Hortega’ de Valladolid, después de que inicialmente fuera desestimada por silencio administrativo la reclamación de responsabilidad patrimonial presentada por Alfredo García Tejero y Juan Balsera Martín, los abogados del paciente soriano.

La representación legal del paciente soriano solicitó a la Administración regional una indemnización para su cliente en concepto de daños y perjuicios.

Ahora, el TSJ de Castilla y León ha estimado el recurso y reconoce el derecho del enfermo a ser indemnizado en la cantidad de 185.574,38 euros en concepto de daños y perjuicios como consecuencia una negligencia médica.

La sentencia, que es firme y por tanto no cabe recurso alguno contra el fallo, señala en los fundamentos de derecho que «la lesión indicada -hernia discal- no exigía un tratamiento quirúrgico inmediato en los términos en que el mismo fue prescrito en el Hospital ‘Río Hortega’ de Valladolid», y matiza que la intervención quirúrgica realizada al demandante «no se ajustó a la praxis exigible y aplicable».

En los fundamentos de la resolución judicial, a la que ha tenido acceso DIARIO DE SORIA / EL MUNDO, se incide en que la hernia discal que padecía J.M.H.L. «no exigía un tratamiento quirúrgico inmediato en los términos en que el mismo fue prescrito en el Hospital Universitario ‘Río Hortega’ de Valladolid y, posteriormente, llevado a cabo el día 24 de junio de 2009», fecha en la que fue intervenido.

Además, se subraya que la resonancia magnética que detecta la hernia discal de la que es intervenido el demandante se realiza el 23 de junio de 2009, es decir un día antes de practicar la intervención quirúrgica, que ya se había prescrito el día 12 de abril de 2009, fecha en la que se firma el consentimiento para ser incluido en la lista de espera con la finalidad de realizar dicha operación. En la sentencia dictada con fecha del 1 de octubre se señala que «la intervención quirúrgica realizada al demandante el día 24 de junio de 2009 no se ajustó a la praxis exigible y aplicable» y se recuerda un informe aportado por la parte demandante que considera que existió un «error quirúrgico» que relaciona con las maniobras quirúrgicas propias de la intervención programada en cuya realización se ha comprimido la médula o el cono medular desarrollando la isquemia medular que se dice en los informes emitidos señalando, además que cuando se opera una columna medular hay que tener muy claro hasta donde llega la médula, el engrosamiento lumbar y el cono medular para no dañarlos».

El TSJ también indica en los fundamentos de derecho que el «consentimiento informado y firmado por el demandante no recoge el riesgo de lesión medular».

En este sentido, la sala de lo Contencioso Administrativo del TSJ de Castilla y León incide en que «la administración demandada no ha acreditado que al demandante se le informara del riesgo indicado por otro medio distinto del consentimiento informado» y añade que «la esposa del demandante ha declarado que esa información nunca se realizó».

Por ello, la sala de lo Contencioso Administrativo del TSJ de Castilla y León considera indemnizable los gastos que tienen relación directa con la paraplejia producida a J.M.H.L. debiendo descartarse aquellos que tienen relación con la intervención quirúrgica programada para corregir los defectos físicos que el demandante presentaba en la columna, además de los días de la lesión medular y de las secuelas que cifra en 185.574,38 euros.