SOCIEDAD
La provincia pierde 1.070 habitantes en el último año
A uno de enero de 2014 Soria presenta un población de apenas 92.221 vecinos
Soria continúa viviendo una sangría poblacional que en el último año supone que la provincia ha perdido 1.070 habitantes según los datos publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE). Las cifras oficiales de población revelan que en la provincia a uno de enero de 2014 hay 92.221 habitantes por los 93.291 que había registrado a principios del año 2013. La pérdida de población se deja sentir en la mayoría de municipios de la provincia y son pocos los ayuntamientos que pueden presumir de tener más habitantes que el pasado año.
Las cifras de población de los últimos años dejan un balance muy negativo para la provincia. Desde el año 2010 Soria ha ido perdiendo población de forma constante, no en vano a uno de enero de 2010 los habitantes de la provincia eran 95.258, es decir, desde 2010 Soria ha perdido exactamente 3.037 vecinos. De los 95.258 habitantes de 2010 se pasó a los 95.233 de 2011 y en 2012 la cifra de población se redujo hasta los 94.522. En 2013 el número de habitantes era solo de 93.291 y este año hay 1.070 menos.
La pérdida de población se deja sentir en especial en los principales municipios de la provincia. En lo referente a la capital según los datos difundidos por el INE señalan que la capital de la provincia ha perdido 237 habitantes en el último año. A uno de enero de 2013 la población de Soria capital era de 39.753 habitantes y el padrón a uno de enero de 2014 es de 39.516. Soria no tenía una población tan escasa desde 2008 y hay que recordar que en 2012 en el municipio estaban contabilizados más de 40.000 habitantes.
El segundo municipio con más habitantes de la provincia sigue siendo Almazán aunque la villa también sufre la pérdida de casi un centenar de habitantes en el último año. Según el INE a uno de enero de 2014 Almazán cuenta con 5.744 habitantes por los 5.843 contabilizados el año pasado. En 2011, Almazán contaba con más de 6.000 habitantes. En una situación parecida está El Burgo de Osma, tercera población de Soria. En este caso el descenso de población es de tan solo 10 habitantes y pasa de los 5.163 habitantes a los 5.153.
En la zona del Moncayo las dos localidades más importantes, Ágreda y Ólvega, también han perdido población. En el caso de la villa agredeña el INErefleja que entre el uno de enero de 2013 y el uno de enero de 2014 la localidad sufre un descenso de medio centenar de personas. En Ólvega la caída de la población es de solo 7 personas. A uno de enero de 2013 el municipio contaba con 3.821 habitantes y los últimos datos del INE señalan que ahora hay 3.814.
En el caso de San Esteban de Gormaz la localidad ribereña presenta una caída de población de casi 100 personas. En 2013, San Esteban de Gormaz contaba con un padrón de 3.160 personas y a uno de enero de 2014 esa cifra se ha reducido hasta las 3.067 personas. Otra de las localidades que va paulatinamente perdiendo población es San Leonardo de Yagüe. En el último año han perdido 54 habitantes y su cifra de población se queda en 2.219.
En Pinares la situación también es preocupante. Covaleda ha perdido seis vecinos, en Duruelo hay ahora 21 habitantes menos que en 2013 y en Vinuesa cada vez se aleja más la cifra de los mil habitantes que durante muchos años mantuvo la localidad. Ahora hay 945 visontinos por los 968 que había en 2013.
Frente a la situación general de pérdida de población de toda la provincia, hay algunos pueblos que resisten e incluso aumentan el número de habitantes. Hay dos casos importantes, dos localidades situadas en el alfoz de la capital de la provincia, Garray y Golmayo. En el caso de Golmayo el municipio rompe la tendencia general de Soria ya que es una localidad que año tras años va ganando habitantes. En el último año la localidad ha ganado 77 vecinos la cifra más alta de toda la provincia. Ahora mismo Golmayo presenta un padrón con 2.391 habitantes por los 2.314 que había a principios de 2013.
En el caso de Garray el municipio de Numancia suma 64 vecinos en tal solo un año. Al igual que Golmayo este municipio está ganando población en los últimos años y con los últimos datos publicados por el INE hay que destacar que se queda a las puertas de superar los 700 habitantes.
Las cifras publicadas ayer por el INE dejan en evidencia que la despoblación es el problema más importante al que tiene que hacer frente la provincia en los próximos años. Soria acumula muchos municipios que no llegan al centenar de habitantes y son varios los caso de localidades que ni siquiera tienen 10 habitantes. Las localidades sorianas que menos habitantes son Villanueva de Gormaz, con nueve habitantes, Quiñonería con ocho habitantes y por último Estepa de San Juan con apenas siete vecinos empadronados en el municipio.