Política
IU lamenta el estado «clientelar» que ‘propicia’ el Ayuntamiento
La deuda del Consistorio es como la del colesterol «que no se ve» y el alcalde «es el Rey Sol»
Enrique García dibujó ayer al alcalde de Soria, Carlos Martínez, como un remedo «del Rey Sol», aunque limitado al municipalismo y con una ejecutoria llena de sombras en su gestión. El edil de IU, en lo que excedió el análisis de lo realizado por el equipo de Gobierno consistorial durante el último año, desveló que a juicio de su formación, Martínez y sus concejales, tras nueve años, están «en el tiempo de descuento y sin capacidad de obtener dinero», por lo que vaticinó que se empieza «a vivir de las rentas». En este punto puso como ejemplo el Plan Intramuros «que se ha envuelto en celofán» para maquillar sus carencias.
La valoración sobre el talante del Gobierno municipal puso a la vista otras zonas oscuras: «En lo que se refiere al pliego del mercado nadie sabe nada. No sabemos qué se está cocinando y cómo. Lamentamos que un proyecto tan importante se haga con los votos solo del PSOE».
Tras prever que un asunto de tanto calado «se aprobará en comisión», casi de puntillas y previsiblemente a finales de esta semana, advirtió que el Ayuntamiento de Soria sufre de «falta de transparencia, algo que deja mucho que desear. En el Ayuntamiento se funciona a golpe de titular. Esto no es serio».
Las puyas de García fueron más allá y llegaron al terreno económico: «La deuda es como el colesterol, que no se nota, pero, ojo», resumió. A su juicio en los últimos años se ha ido creando «un estado clientelar, que es peligroso» y que, en su opinión, responde al «colegueo» con la idea de crear «adeptos».
Todo dentro de un «uso excesivo» de las atribuciones del equipo de Gobierno que, denunció, ha llegado a establecer restricciones para el uso de la sala de prensa, en lo que IU advierte que se trata de un intento por instrumentalizar y capitalizar en exclusiva la imagen institucional en su favor.
malos años
La falta de información con que se despacha a los partidos de la oposición fue otro de los argumentos que manejó García: «No sabemos cómo está la tesorería y creemos que vamos a pasar unos años complicados por falta de dinero líquido», remató.
Asimismo se lamentó «el abandono en los barrios (Oteruelos, Pedrajas) y del extrarradio de la ciudad. El edil de IU criticó también que no se haya asumido «ningún esfuerzo para facilitar acceso a la vivienda», censurando la carestía de «las escuelas infantiles, del precio del agua, del Impuesto de Bienes e Inmuebles (IBI) o del impuesto de circulación» .
García concluyó recordando la creciente Inseguridad vial «con aumentado de accidentes e incidentes», los recortes en materia deportiva o el empeorando de la calidad del aire.
Junto a las críticas también un espacio para el reconocimiento. En la parte positiva se quiso «dar mérito» a que «el equipo de Carlos Martínez» vaya a finalizar el mercado municipal, aunque «ahora queda el reto de darle contenido y ponerlo en marcha y que funcione para revitalizar el comercio de la zona». Asimismo se valoró el desarrollo de Numancia 2017 que «está ganando en la medida que otras voces se van sumando voces de la cultura, la ciencia y la arqueología», haciendo mejor un proyecto que, en principio, tenía un sesgo más «folklórico y festivo».
Con todo, García también quiso recordar, ya en otro plano, el del desacuerdo, la situación del polígono de Las Casas «que está igual de desastroso que en 2008 y donde debemos 750.000 euros», a pesar de que las calles sigan «intransitables» y no se haya aumentado la presión del agua, «que es para lo que se hizo».
Por último se refirió al pabellón de La Juventud, «que no sabemos si es luz o es sombra. Es muy difícil criticar. Es edificio nuevo, que ha costado una millonada, cuando ya teníamos un pabellón». Tras criticar que se haya hecho «obra civil con fondos públicos», reseñó que se deben solventar algunos problemas aparecidos «que se subsanarán».
Por último, aseguró que «se contrasta falta de personal. Se cierra una piscina para abrir otra», discrepando del método utilizado» para asumir la construcción.