AUDI Q2
SUV de etiqueta
Probamos el nuevo modelo con un diseño atrevido, un comportamiento intachable y sin etiquetas
El pasado mes de agosto visitamos Ginebra para probar las primeras unidades del nuevo Audi Q2. Bilbao y Santander han sido las localidades escogidas para volver a subirnos al volante de este SUV de contenidas dimensiones (4,19 metros de largo) y con mejoras sobre las preseries testadas anteriormente. Su objetivo está claro: rejuvenecer la marca con un modelo pensado para solteros o parejas, de menos de 40 años y atractivo para las mujeres. Las bases también: un diseño arriesgado, comportamiento deportivo y la máxima conectividad posible.
Como ya se puede leer en el artículo anterior, su narrativa estética es muy distinta a lo que Audi nos tiene acostumbrados. Bien por ellos. Las formas poligonales se encuentran en la parrilla, el lateral y la zaga, con unos grupos ópticos muy separados que generan sensación de amplitud. El interior cuenta con unas inserciones que restan seriedad al diseño y que pueden contar con iluminación (opcional). En cuanto al maletero de 405 litros, es 25 l superior al del A3 pero tampoco es su mejor baza.
Cuenta con dos acabados, el Design Edition y el Sport Edition. Además de las diferencias estéticas en los paragolpes, retrovisores y llantas específicas también tienen dos niveles superiores cada uno: el Interior Design Edition y S Line respectivamente. Como punta de lanza para su lanzamiento Audi trae a España la versión Untaggable Edition como máximo exponente de exclusividad con llantas de 19 pulgadas, color específico, retrovisores y el blade (pilar C) en color negro con el anagrama de los cuatro aros.
En cuanto equipamiento lo más destacable, como viene siendo habitual en los últimos de la familia, es el Audi virtual cockpit y el Audi Drive Select, que permite cambiar los modos de conducción. Los sistemas de ayuda a la conducción tampoco faltan pero sorprende que en el apartado confort no se ofrezcan los asientos con regulación eléctrica.
MOTORES EN ESPAÑA
En su primera presentación nos hablaron de todos los propulsores disponibles. En el apartado gasolina el Audi Q2 se lanza con el 1.4 TFSI de 150 CV pero pronto llegarán el 1.0 TFSI de 116 CV y el2.0 TFSI de 190 CV, que pudimos probar. En cuanto al diésel también encontramos un 1.6 TDI de 116 CV, que condujimos, y el 2.0 TDI de 150 y 190 caballos.
Como ya sucedió en la primera prueba la dirección progresiva (de serie) es algo blanda a bajas velocidades pero gana protagonismo en cuanto se corre. El TFSI de 190 caballos llega con la tracción total de serie y cambio automático de siete velocidades mientras que el diésel de 116 CV era delantero y manual. Ambos tienen un dinamismo por curva correcto pero el primero permite algo más de velocidad, diversión y control, vital en las tierras mojadas del norte. El cambio de doble embrague de nuevo desarrollo es de serie en el superior y se nota mucha mejoría en cuanto a velocidad y es muy complicado notar un vacío de potencia.
Los precios de este Audi Q2 lo sitúan como un coche de acceso, superior al A1 pero cercano al A3, con quien rivalizará ciertamente. Cogiendo de base el Q2 con el motor 1.6 TDi de 116 CV los precios van desde 27.450 euros para el Design Edition, pasando por 17.850 euros del Sport Edition y 36.130 euros del Untaggable Edition. Al contrario que pasó en Ginebra esta vez los directivos quisieron hablar del futuro de Audi, que renovará el 90% de su gama antes del 2008 y sumará modelos para llegar a los 60 modelos en 2020. Uno de ellos será el Q8 pero también dejaron entrever algunos vacíos a cubrir entre el Q3 y Q5 y anterior al Q2. Veremos que sucede en los próximos años.