De Gregorio confía en que el tren mantenga la declaración de OSP

La subdelegada del Gobierno en Soria, Yolanda de Gregorio, considera que la declaración de Obligación de Servicio Público (OSP) de la Soria-Torralba no corre peligro. Esa es al menos la sensación tras las conversaciones mantenidas en las últimas semanas con los distintos responsables del Ministerio de Fomento. A falta de confirmación oficial, que dependen del propio Ministerio, el siguiente paso será determinar la fórmula que pondrá en marcha el Ejecutivo para completar la modernización.

Fuentes de la Subdelegación indicaron que De Gregorio ha mantenido en las últimas semanas diferentes conversaciones con los responsables de Adif, Renfe y Transporte Terrestre. La conclusión general es que la declaración de OSP se mantendrá durante los próximos años. Estas mismas fuentes recalcaron que el mantenimiento de la OSP no será oficial hasta que el Ministerio lo comunique públicamente. Básicamente, la OSP es una figura mediante la que el Gobierno concede una subvención a aquellas líneas que no son viables bajo un criterio comercial.

Si finalmente la Soria-Torralba mantiene la OSP la principal duda radicará en la fórmula para completar la modernización de la línea y mejorar su competitividad. El trayecto consta de 93 kilómetros entre Torralba y Soria. En el año 2007 se adjudicó a la empresa Comsa la primera fase de la modernización. Esta actuación, que costó 16,6 millones de euros, afectó a un tramo situado entre los puntos kilométricos 12,8 y 43,3, coincidiendo con la estación de Coscurita. Este tramo era el que mayor grado de degradación presentaba y mejoró el trayecto que discurre por municipios como Yelo, Alcubilla de las Peñas, Taroda, Adradas, Morón de Almazán y Coscurita

La segunda fase de la modernización llegó a estar adjudicada también y pretendía actuar entre Coscurita y la capital de la provincia y en los 13 kilómetros iniciales de la línea. El presupuesto era de unos 20 millones de euros. Este proyecto no suponía una modificación del trazado, pero si incrementaba la seguridad y la calidad del servicio. Sin embargo estas obras no se llegaron a ejecutar ya que la iniciativa quedó suspendida y hace unos años se renunció al contrato suscrito con Acciona.

En 2014 las obras continuaron aunque se limitaron al tramo entre el kilómetro 43 y el 57. Fundamentalmente, se trató de labores de colocación de los raíles y traviesas que quedaron junto a la vía. Se invirtieron unos 5 millones de euros y concluyeron en febrero de 2014.

Según informaron desde la Subdelegación, actualmente Adif está trabajando en la rehabilitación de la vía entre los puntos 58,8 y 60,2 y entre el 60,2 y 91. Estas intervenciones están llamadas a suprimir las limitaciones temporales de velocidad que afectan a esos tramos. Estas pequeñas mejoras son el paso previo antes de que se ejecute la modernización de la línea. Se espera que antes de final de año desde el Ministerio se aclaren definitivamente los planes con respecto a esta línea, es decir, si ejecutará la modernización prevista o se harán obras de más calado.