El temporal mantiene en jaque a la a red secundaria

El temporal de nieve volvió a dejar ayer complicaciones en las carreteras y en la ciudad. Conforme avanzaba la mañana la situación fue remitiendo en la red principal gracias a las labores de diversas instituciones y a que las precipitaciones cesaron. No obstante la red secundaria mantuvo cortes puntuales e intermitentes en varios puntos, amén de mantener tramos con cadenas en la zona de Retortillo.

Hubo problemas reseñables que comenzaron ya en la noche del sábado al domingo y cinco localidades (Ausejo de la Sierra, La Rubia, La Riba de Escalote, Paones y Alaló) tuvieron serios problemas de comunicación durante algún momento del día, llegando a cortarse los accesos principales.

Durante la jornada sabatina la zona de Pinares se había librado en parte de la copiosa nevada, pero en torno a las 22.00 horas comenzó a caer con fuerza y a cubrirse el suelo. Las carreteras se complicaron bastante e incluso una quitanieves terminó saliéndose de la vía en Covaleda. Aunque no hubo cortes, en vías como la CL–117 (de Abejar hacia la provincia de Burgos) el firme estaba cubierto con una capa deslizante y la señalización se veía con dificultad.

El espesor de la nieve complicó la circulación en numerosas carreteras de la zona y en las calles de las localidades. Valga apuntar que el viernes, el Punto de Nieve de Santa Inés acumulaba una capa de 10 centímetros. Ayer ya era de 100 centímetros, un metro de nieve tanto para los esquiadores como para quien quisiese acercarse a disfrutar de un paisaje espectacular. Además, el acceso estaba limpio por lo que en este caso la nieve sí fue un atractivo para despedir las vacaciones navideñas. Eso sí, con la caída del sol pasó a estar en nivel rojo según la DGT con uso obligatorio de cadenas.

A pesar de que el temporal se había recrudecido en Pinares los cortes se produjeron en otros puntos, por ejemplo en la SO-340, entre Gómara y Serón de Nágima. La carretera amaneció cortada aunque a media mañana ya se había conseguido abrir, si bien con nivel amarillo (vetado a camiones rígidos y trailers).

Asimismo se produjeron otros dos cortes muy puntuales por causas meteorológicas, concretamente por «obstáculo fijo». No obstante fuentes oficiales confirmaron que no se trataba de accidentes, por lo que la información de la Dirección General de Tráfico (DGT) aludía muy posiblemente a la formación de neveros.

A las 12.57 horas se procedía a cortar un carril en la SO–100 a la altura de Fuentepinilla por este motivo, si bien en menos de media hora se había recuperado la normalidad. En Navaleno, en el kilómetro 3,5 de la SO–P–6002, la situación había comenzado media hora antes y fue algo más prolongada.

La zona suroeste, especialmente en los alrededores de Retortillo, llegó a acumular tres tramos muy complicados para circular, con la necesidad de usar cadenas. En Paones y Alaló, de hecho, se llegó a considerar «intransitable» la carretera. Asimismo se mantuvo la necesidad de usar cadenas por segundo día consecutivo en la SO–160 entre los kilómetros 20 y 40; en la SO–135 del kilómetro cero al 36,8; y en la SO–132 del kilómetro 45 al 62. Por la tarde (17.51 horas) se cortó esta zona, afectando a La Riba de Escalote. De esta forma, las comunicaciones con la vecina Castilla–La Mancha quedaron bastante afectadas en la red secundaria.

Además, la CL-101, de Ágreda a Almazán, se mantuvo en nivel verde con advertencia de pavimento deslizante. La CL-116 no presentó complicaciones después de que el sábado el puerto de Alentisque se convirtiese en una de las zonas conflictivas, algo que ayer había quedado totalmente solucionado.

También hacia Tierras Altas hubo problemas. El puerto de Oncala requirió trabajos especiales para poder abrir si bien a mediodía ya estaba en nivel verde. La SO–615 también fue mejorando a lo largo del día y sobre las 14.00 horas se levantaron los avisos. Sin embargo, a esa misma hora se cortó el tráfico en la SO–620 entre los kilómetros cero y 8,6, afectando a Ausejo de la Sierra y La Rubia.

Respecto a las principales vías de comunicación, el estado fue bastante bueno durante la mayor parte de la jornada. Los conductores reseñaban que la entrada y la salida de la capital era quizás lo más complicado, pero las nacionales y autovías estaban limpias. El puerto de Piqueras, cortado el sábado en su vertiente riojana, se abrió sin establecer restricciones.

No obstante hubo que realizar pasadas a media mañana por la variante de Ágreda, uno de los puntos que estaban más afectados. En la noche del sábado se había decidido no realizar la conexión con Madrid y Logroño en autobús debido al estado de las vías de conexión, pero se recuperó posteriormente.

También volvió la normalidad a la A-2. El sábado, desde las 18.00 horas, se había decidido embolsar a los escasos camiones que circulaban en sentido Madrid para evitar siniestros derivados de la posible falta de adherencia. A las 4.00 horas de ayer se decidió levantar esta medida cautelar y por la mañana se consideraba que, aunque era necesario moverse con precaución, la red estatal en Soria estaba en buenas condiciones para circular.

En la capital se decidió la suspensión de los servicios de autobús, si bien a media mañana y ante la evidente mejoría se restituyeron salvo en el caso del Calaverón. Asimismo en el parque de La Dehesa y otras zonas arboladas se produjeron desprendimientos de ramas por el peso acumulado, mientras que la subida de temperaturas a mediodía hizo que la nieve acumulada en los aleros se precipitase sobre las aceras, ocasionando molestias a los peatones.

A primera hora de la mañana la Policía Local avisó a través de las redes sociales de la conveniencia de no salir a la calle ni utilizar vehículos, ofreciéndose a atender a quien necesitase desplazarse por cuestiones sanitarias al hospital o a los centros de salud. Poco después de las 12.00 horas, la sal esparcida el sábado –que había ablandado la capa– y los trabajos de retirada reanudados ayer a las 7.00 horas permitían abrir camino en aceras y calzadas, lo que hizo que se recuperase cierta normalidad.

Aún así, los bomberos tuvieron que intervenir tirando la nieve de cornisas en calles como Enrique García Carrilero y Maestro García Muñoz. Asimismo y junto con la Policía Local, aseguraron parte de la fachada trasera del colegio de las Escolapias, en la calle Sagunto, al verse afectadas por el peso de la nieve acumulada el fin de semana.

En otro orden de cosas, se informó de que la calefacción del Colegio Público Infantes de Lara había sufrido una avería finalmente resuelta. Aunque inicialmente se había recomendado que los niños acudiesen hoy bien abrigados ante la posibilidad de que la temperatura en el centro fuese inferior a la habitual, la reparación permitió encenderla en la tarde de ayer para ir recuperando el calor. Aun así es conveniente que vayan abrigados.

En resumen, conforme avanzó la jornada de ayer la situación en las carreteras principales y el la ciudad mejoró sensiblemente, llegando a estados de normalidad a partir del mediodía. Sin embargo en la red secundaria los problemas se reprodujeron por segundo día consecutivo y al cierre de esta edición aún había localidades con los accesos complicados. En cotas bajas y media las máximas, que rondaron los cinco grados, ayudaron a que parte de la nieve se regalase. Sin embargo, aún quedan afectados.