La muralla lleva casi cinco años en la Lista Roja del Patrimonio
Hispania Nostra la incluyó en los monumentos en riesgo de destrucción en febrero de 2013
Grietas, descalces tales que suponen un peligro de desplome, un torreón agujereado, elementos extraños, destrozos causados por la vegetación, derrumbamientos más o menos lejanos y otros en los últimos años. Un estado de deterioro especialmente notorio aguas arriba del puente de piedra, pese al arreglo de dos portillos. Pero no sólo aquí. También los cubos de la ermita del Mirón «están deteriorándose a un ritmo acelerado». Con tales elementos no es de extrañar que la Asociación Hispania Nostra incluyera a la muralla de Soria en su Lista Roja del Patrimonio y que, a la espera de una restauración, allí siga atascada. Casi cinco años en la relación de los monumentos que según define la entidad de conservación del patrimonio se encuentran en «riesgo de desaparición, destrucción o alteración esencial de sus valores».
Fue el 13 de febrero de 2013 cuando la antigua cerca medieval conoció el demérito de figurar como elemento amenazado. Entonces ni siquiera se había producido el aparatoso derrumbamiento en la plaza del Vergel (sucedió en marzo de ese año), un hecho del que se hace eco Hispania Nostra. De este suceso y de los dos menores que afectaron a la cerca en el parque de Santa Clara a comienzos de 2014. El tramo final, próximo a Antolín de Soria, había sido restaurado en 2006.
Según Hispania Nostra, la inclusión en la Lista no depende de un peligro en general, sino de un «riesgo grave». Y eso es lo que detectó en su día su comité científico y sigue manteniendo. La entidad recoge en su web el informe que en noviembre de 2013 dio a conocer la Asociación de Amigos del Museo Numantino. Un documento en el que analizaba los diferentes tramos y sus problemas y proponía diversas soluciones. Frustrada la expectativa de arreglo gracias a la ayuda del 1,5% Cultural, los restos de las defensas medievales siguen en riesgo, sin que se vislumbre su acceso a la Lista Verde, aquella que certifica el fin de los problemas.