CaixaBank por blanqueo de dinero de la mafia china
El juez Moreno destaca operaciones de 10 de sus sucursales para el presunto favorecimiento y ocultación de fondos de clientes chinos investigados judicialmente
El juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno ha imputado a CaixaBank por blanqueo de capitales por la actuación de 10 de sus sucursales, ubicadas en el centro de Madrid, para presuntamente favorecer y ocultar fondos de clientes de nacionalidad china investigados en distintas causas judiciales contra la mafia china, como 'Emperador' o 'Snake'.
El juez sostiene que los directivos y empleados de esas sucursales, entre 2011 y 2015, actuaron "como canales de blanqueo", aun cuando podían sospechar que sus clientes estaban inmersos en actividades ilícitas de fraude por "las ingentes imposiciones en efectivo que realizaban”. Además hicieron "caso omiso" de los requerimientos judiciales que recibían sobre ellos. La investigación a ICBC (Industrial And Comercial Bank Of China S.A) por blanqueo al servicio de organizaciones criminales chinas destapó cómo funcionaban estas sucursales.
Fuentes de CaixaBank niegan cualquier tipo de colaboración o participación en el blanqueo de capitales presuntamente cometido por ciudadanos de nacionalidad china. La entidad reitera que tiene "una fuerte y comprometida cultura de cumplimiento normativo" y que ha cumplido en todo momento con la normativa vigente en materia de prevención de blanqueo de capitales.
Masivas remesas de dinero
Sin embargo, el juez cree que las organizaciones que eran sus clientes generaban masivas remesas de dinero en efectivo, por delitos contra la Hacienda Pública y en menor medida contra la Propiedad Industrial y el contrabando. Tanto en Caixabank como en ICBC lograban ingresarlo y transferirlo a China y Hong Kong "sin riesgo de ser descubiertos".
Las sucursales les “auxiliaron" al admitir su dinero "sin indagar su origen, aceptando cualquier papel o justificación que se les presentaba y facilitando su transferencia en importes pequeños que no debían ser comunicados al Banco de España”.
El SEPBLAC destaca que entre 2013 y 2015 fueron 193 (76 personas y 117 sociedades) los clientes de CaixaBank imputados por blanqueo que transfirieron 99,1 millones de euros a China y Hong Kong. De 165 de ellos no realizaron exámenes especiales ni comunicaron nada al SEPBLAC, lo que les permitió enviar 31,7 millones de euros.
El auto detalla que los directores de las sucursales investigadas permitieron el uso de testaferros, actividades económicas no justificadas y repetían un patrón para evitar a Hacienda: fraccionaban facturas, con empresas instrumentales y sin controlar a los clientes. Con la banca on line, los líderes de la organización criminal podían operar hasta sin testaferros. Solo en el 'caso Emperador' ordenaron 2.254 transferencias por valor de 41.648.140 euros.
Fallo del sistema de control
Según el juez, desde 2013 existen fallos del sistema de control para la prevención del blanqueo de capitales, conocidos por todo el personal directivo de la entidad CaixaBank “y en especial por el que fue su responsable de cumplimiento normativo” entonces. Y ello determina su imputación como persona jurídica, sin perjuicio de los indicios de responsabilidad que puedan existir contra sus empleados y directivos.
CaixaBank no implementó las medidas necesarias y adecuadas de prevención, pese a conocer los riesgos en los que incurrió su red de sucursales. “Se permitió operar, obviando la diligencia debida, a nacionales de países asiáticos sospechosos de estar implicados en investigaciones por blanqueo y fraude", sentencia el juez.