Heraldo-Diario de Soria

MICOLOGÍA

El repunte en noviembre de níscalos y setas de cardo «salva la temporada»

En la última semana se han registrado rendimientos de recolección de hasta 6 kilos por hora

El cocinero Carlos Aldea durante la demostración que realizó en el Mercasetas.-LUIS ÁNGEL TEJEDOR

El cocinero Carlos Aldea durante la demostración que realizó en el Mercasetas.-LUIS ÁNGEL TEJEDOR

Publicado por
IRENE LLORENTE YOLDI
Soria

Creado:

Actualizado:

Las copiosas lluvias que se han registrado en los últimos días y las suaves temperaturas que se han mantenido hasta esta semana han permitido una «gran fructificación sobre todo de setas de cardo en los eriales y de níscalos en pinares de llanura», lo que ha permitido «salvar la temporada para los recolectores.

Pero el boletus se da por perdido ya a estas alturas». Lo explica José Antonio Vega, técnico de Micocyl-Montes de Soria, quien también constata que las heladas de los últimos días «van a complicar la posibilidad de encontrar grandes producciones de ahora en adelante». Han sido las dos últimas semanas de noviembre cuando se están registrando los picos productivos o máximos de producción de toda la campaña, salvo en el boletus.

Y es que aunque hubo una pequeña fructificación de boletus en septiembre, luego se paró hasta finales de octubre y la primera quincena de noviembre, cuando sí se registraron producciones de más de cinco kilos por hectárea, pero luego ya en las dos últimas semanas la fructificación ha sido mínima.

Ahora mismo la producción de Boletus edulis es «nula o escasa. Aunque es posible encontrar algún ejemplar aislado en las zonas productoras, como es la comarca de Pinares, las cantidades recolectadas son poco relevantes». Y con rendimientos de recolección en valores muy por debajo del medio kilo por hora.

Sí que es cierto que en la segunda quincena de noviembre se ha generalizado la producción de níscalos en las Comarca de Pinares Llanos de la provincia, al igual que en otras áreas del sur, este y oeste de la provincia, siempre en los pinares situados fuera de cotas elevadas de las orlas montañosas con producciones medias en torno a 3,5 kilos por hectárea, pero registrándose rendimientos de recolección en las zonas más productivas superiores a seis kilos por hora.

Además, estas producciones son de «muy buena calidad, presentando grados de parasitación muy bajos». Sin embargo, la relación de ejemplares de medio o pequeño tamaño, frente a los ejemplares de mayor tamaño (maduros) ha disminuido considerablemente, reflejando esto un agotamiento de las fructificaciones.

No obstante, las actuales condiciones climatológicas continúan siendo propicias para la fructificación de esta especie, con lo que no es descartable que se desencadenen nuevamente fructificaciones de esta especie. «Sí que es verdad que el níscalo aguanta el frío bastante, y hay otras especies que necesitan que empiecen las temperaturas bajo cero para fructificar, como la negrilla o la capuchina. Son comestibles y les gusta más el frío», de modo que son las que se verán en los próximos días, añadió Vega.

En lo que respecta a la producción de seta de cardo (‘Pleurotus eryngii’) en los eriales (terrenos agrícolas abandonados) de la región se ha reducido de manera importante. De los muestreos realizados se estiman rendimientos de producción medios, inferiores a medio kilo por hora, siempre dentro de los hábitats productores de esta especie.

Esta reducción de la producción puede ser debida al descenso de las temperaturas mínimas de esta última semana y la propia dinámica de fructificación de esta especie ya que se llevan registrando fructificaciones relevantes de la misma a lo largo todo el mes de noviembre.

tracking