LOTERÍA
El Gordo ‘rebota’ en Tierras Altas
Un grupo de diez amigos vinculados al norte de la provincia se reparte cinco décimos del primer premio en el sorteo del Niño
El sorteo del Niño pasó de largo de las administraciones, pero no de los sorianos. Un grupo de diez amigos vinculados a Tierras Altas y el Valle y, en su mayoría, repartidos ahora por otra provincias se repartió cinco décimos del primer premio. Y el alcalde de Renieblas, Isidoro Gallardo, sumó el sexto décimo soriano gracias al intercambio lotero que hace con su hermana residente en Barcelona. ¿Más casualidades? Uno de los agraciados del grupo de amigos es familiar de Gallardo. «Eso es aparte de lo mío».
La noticia pronto se extendió como la pólvora, especialmente en lo referente al grupo de amigos. Tres de los agraciados tienen relación con Almarza y aunque dos de ellos residen fuera, el tercero es vecino de la localidad. En pleno día de fiesta por la celebración del Arca, su llegada a un bar de la localidad «dando gritos» anunció que una vez más la lotería había salpicado a la provincia aunque fuese de rebote.
Según pudo saber este medio, el grupo de amigos compartió para el Sorteo de Navidad varios décimos como es habitual desde hace años. Uno de ellos dejó la pedrea. Para no tener que repartir los 100 euros entre personas que no siempre tienen fácil verse, se reinvirtió en El Niño.
Uno de los premiados –en su mayoría prefieren mantener la discreción y que no figure el nombre– confirmó que «en Navidad jugamos 10 amigos la lotería de nuestros pueblos y, cuando en alguno no hay, se compran otros décimos». La suerte quiso que un décimo llevase pedrea y que acabase convertida en cinco décimos del 37.142. Ayer, una nueva conversión más, aunque esta vez en un millón de euros.
Sin embargo, no todos los amigos vibraron con el sorteo. «Yo me he enterado a mediodía, cuando me han llamado de Almarza». En un día tan señalado «estás pendiente de los peques, regalo para arriba, regalo para abajo, y ni sabía dónde había dejado el móvil». El teléfono sonó y explotó la alegría. «Todavía no me lo creo, he estado chillando de alegría mientras hablábamos entre nosotros».
El premio, eso sí, viajará lejos. Salvo el residente en Almarza y un caso en San Leonardo, el resto residen «por Barcelona, Logroño y Madrid sobre todo». Algunos regresaron en la tarde de ayer a sus lugares de trabajo con la tristeza que da el final de la Navidad mitigada.
Por su parte, Gallardo no ocultaba su alegría en la tarde de ayer pero hacía gala de la sobriedad de los numantinos que otrora rondaban por Renieblas. «Siempre que juegas lo haces con la ilusión de que te toque. Pero no hemos hecho chorradas, que somos ya gente mayor», bromeó. Tras la alegría inicial «aquí nos hemos quedado. Hemos comido y estamos con los amigos. Estamos con cafecito, alguna copita...».
Su décimo llegó como parte del intercambio que hace anualmente con una hermana residente en Barcelona. «Yo le cojo dos décimos para Navidad y ella me da uno de Navidad y uno del Niño». De hecho, «en Navidad sí que juego bastante y me gusta, pero para el Niño no suelo jugar», así que el décimo premiado aún tuvo más de sorpresa.
Curiosamente, Renieblas acababa de ser noticia por ser el único ayuntamiento soriano que gana ediles para las próximas elecciones gracias al incremento de la población. «Dos concejales más hace unos días y hoy (por ayer) me toca la lotería. No puedo pedir más». No obstante, sí lo hizo: «Salud, felicidad y sintonía entre todos» para el año que acaba de entrar. En su caso, 2019 parece que es un número que trae suerte.
Y suerte es la que tuvo otro soriano, por el momento ignoto, pero en el sorteo de la Bonoloto celebrado en la noche del sábado. Un apostante logró un premio de segunda categoría (cinco números más el complementario) para embolsarse 49.190,79 euros. El boleto se selló en el bar Delicias.
Así, entre unas cosas y otras, entre la noche del sábado y la mañana de ayer la suerte dejó cerca de 1.250.000 euros en Soria. No obstante, los sorianos volvieron a ser los que más tentaron a la suerte de toda España, con un gasto medio por habitante de 46,06 euros, el triple de la media nacional. Eso sí, respecto a 2018 el gasto sólo baja en cuatro provincias y esta es una de ellas, con una caída del 1,12%, la segunda mayor.