Automoción
Carlos Ghosn dimite como presidente de Renault antes de ser destituido
Según el ministro de Finanzas de Francia, el también expresidente de Nissan y Mitsubishi iba a ser destituido esta semana. Ghosn sigue en la cárcel pese a haberse ofrecido a llevar tobillera de localización, a no salir de Tokio y a contratar seguridad que le vigilara
Carlos Ghosn ha dimitido como presidente del grupo Renault antes de ser destituido este jueves por el consejo de administración del grupo francés, según anunció el ministro de Finanzas de Francia, Bruno Le Maire, en el Foro Económico Mundial de Davos (Suiza).
El comité de nombramientos de Renault apoyará ahora a Jean Dominique Senard, de 66 años y anterior consejero delegado de Michelin, como nuevo presidente de la empresa, mientras que Thierry Bolloré, que ejerce de forma temporal las responsabilidades de Ghosn, se convertirá en el director general de la empresa.
SIGUE EN LA CÁRCEL
La justicia japonesa volvió este martes a rechazar la solicitud de libertad bajo fianza de Ghosn, que se ofreció incluso a llevar una tobillera de localización, a no salir de Tokio, a contratar seguridad privada para que controlaran sus movimientos e incluso a vender acciones de la empresa para abonar una mayor fianza.
Con esta decisión, el directivo de 64 años, es probable que permanezca bajo custodia hasta el juicio. Tras una investigación interna llevaba a cabo por Nissan, Ghosn fue detenido el pasado 19 de noviembre por haber comunicado supuestamente a las autoridades del país que había recibido en varios años menores remuneraciones de las reales, así como por malas prácticas.
En concreto, ha sido acusado formalmente de un agravante de violación de confianza por transferir temporalmente pérdidas de inversiones personales a Nissan en 2008, así como por subestimar su retribución por tres años hasta el 2018. El directivo está acusado de comunicar unos ingresos menores de los que realmente percibió a los supervisores japoneses. En concreto, está acusado de publicar una compensación económica por su responsabilidad al frente de Nissan de menos de la mitad de los 88 millones de dólares (77 millones de euros) que recibió durante cinco años desde 2010.
Además, la Fiscalía japonesa también acusa a Ghosn, a Nissan y al exdirector representante del fabricante Greg Kelly de no haber declarado parte de las compensaciones recibidas por el máximo responsable de la empresa entre marzo de 2015 y marzo de 2018.
Nissan y Mitsubishi también han presentado los resultados de una investigación interna en la que han concluido que el directivo cobró de forma irregular 7,82 millones de euros de una asociación estratégica creada para explorar las posibles sinergias entre las dos firmas.