CAMPAÑA
Las grandes empresas de EE UU se comprometen a velar por los intereses de la sociedad
Sus representantes afirman en un comunicado que la máximización de beneficios dejará de ser su única prioridad
No está claro si es un brindis al sol para mejorar su imagen corporativa o una genuina declaración de intenciones para adaptarse a lo que exige la sociedad. El tiempo dirá. Lo cierto es que las grandes empresas estadounidenses se han comprometido a tener en cuenta el bien común a la hora de tomar sus decisiones corporativas, guiadas hasta ahora por una sola premisa: maximizar los beneficios para sus accionistas. La organización que representa a los titanes de la industria estadounidense ha rescrito este lunes su propósito corporativo, algo así como la razón de ser de las 200 compañías a las que representa. En un comunicado ha afirmado que a partir de ahora tendrán también en cuenta los intereses de sus trabajadores, consumidores y las comunidades donde operan.
Cada una de las partes interesadas es esencial. Nos comprometemos a aportar valor a cada una de ellas en pos del éxito futuro de nuestras compañías, nuestras comunidades y nuestro país, asegura el comunicado de la Business Roundtable, una organización que promueve los intereses de las grandes empresas en el ámbito de las políticas públicas. El texto ha sido suscrito por los consejeros delegados de 181 de las 192 compañías que la integran, una lista de adhesiones que incluye a J.P. Morgan, Apple, Boeing, Amazon, Exxon o Coca-Cola. El cambio de directrices llega en un momento de creciente animadversión social hacia la clase empresarial, a la que se responsabiliza de las desigualdades económicas que marcan la vida estadounidense, unas desigualdades que no se veían desde los años treinta del siglo pasado.
Varios candidatos demócratas han hecho de los ataques contra la oligarquía empresarial el eje central de sus campañas y han propuesto medidas para reducir los salarios de sus ejecutivos, prohibir las recompras de acciones o forzar a las compañías a incluir a representantes de los trabajadores en sus juntas directivas. Como respuesta parecen haber encontrado un propósito de enmienda de esas mismas compañías, guiadas hasta ahora por el credo neoliberal establecido en su día por Milton Friedman, quien negó que las empresas tuvieran responsabilidad social.
El comunicado de la Business Roundtable afirma su compromiso para invertir en los trabajadores, ayudándoles en su formación para adaptarse a los cambios tecnológicos y promoviendo la diversidad, la inclusión y el respeto. Esto empieza con compensarles de forma justa y ofrecerles beneficios importantes, dice el texto. También se compromete a proteger el medioambiente mediante "prácticas sostenibles" que sirvan para respetar a la población de nuestras comunidades.