DESPOBLACIÓN
Sillas con alma que exigen un futuro para los pueblos
Ana Sánchez ya ha recopilado casi 200 de las 243 sillas del proyecto ‘Sillas Solidarias’ que en septiembre esperan llegar al Congreso
Ana Sánchez y su familia son los únicos habitantes de Castejón del Campo (Soria) en invierno. Desde hace dos años, y tras pasar el covid, reside en el pueblo de forma permanente. Antes iba todos los fines de semana y durante una jornada, una tormenta derribó una vivienda dejando a la vista un sencillo comedor con sus sillas. El mobiliario fue lo único que resistió la embestida. Esa imagen inspiró a Sánchez que en agosto de 2019 lanzó el proyecto Sillas solidarias para mostrar el poder de las sillas como símbolo de transmisión, un mensaje positivo que quiere reivindicar que los pueblos tienen futuro y que sus habitantes son «ciudadanos de primera».
El objetivo con el que nació Sillas Solidarias era alcanzar las 243 sillas y Sánchez ya tiene 194. 243 no es un número al azar. Son los kilómetros que separan Castejón del Congreso de los Diputados. La convocatoria nació a través de las redes sociales, pero varias asociaciones y colectivos, como Soria Ya, se han sumado al proyecto. De las 194 sillas ‘solo’ 63 proceden de la provincia de Soria, las demás han llegado de todos los rincones de la España Vaciada. Precisamente Soria Ya ha realizado esta semana un llamamiento a sumarse al proyecto y estas semanas se ha cerrado el apoyo de un colectivo de Calatayud (Aragón).
La propia Ana confía en que se cumplirá el objetivo de alcanzar las 243 sillas. El plazo para la recogida de los muebles concluye el próximo 15 de septiembre y en ese momento se activará la segunda fase del Sillas Solidarias. A través del grupo parlamentario de Teruel Existe y el apoyo de plataformas ciudadanas como la Coordinadora de la España Vaciada o Soria Ya, Sánchez confía en que las 243 lleguen a la sede de la soberanía nacional y sean ‘recibidas’ en el Congreso.
Todas aquellas personas interesadas en participar tienen que personalizar una silla con el tema que deseen – su pueblo, su familia, un mensaje, una reivindicación – y ponerse en contacto a través de Instagram con el perfil @castejondelcampo, enviando foto y vídeo. A través de esta vía de contacto se les informará de cómo hacer llegar sus trabajos a Castejón. Ana Sánchez insiste que el proyecto no pretende «caer en el victimismo» y quiere ofrecer una imagen «positiva» de la vida en el medio rural y de las oportunidades que ofrecen los pueblos.
No es la única iniciativa reivindicativa ligada a las sillas que impulsa Ana Sánchez. De nuevo, el mobiliario es protagonista en ‘Sillas a la calle’, una acción coordinada a través de redes sociales que ya cuenta con unas 400 personas que han confirmado su participación, De cara a los meses de octubre o noviembre, se marcará una fecha y una hora para que todos los participantes saquen sus sillas decoradas a la calle y suban su imagen a instagram. Sánchez espera que con Sillas a la calle se llegue a los 500 participantes y ya han contactado con ella interesados de Andalucía o Aragón, por poner un ejemplo.
último impulso
La plataforma Soria Ya ha lanzado una campaña de apoyo al proyecto para darle el último impulso y defienden una acción «artística y reivindicativa que busca implicar y concienciar a las gentes de los pueblos de la provincia de Soria, zona cero de la despoblación, y de la España vaciada». La plataforma recuerda que con este proyecto «se quiere llamar la atención a administraciones y clase política ante el problema de la despoblación». «En palabras de la propia Ana Sánchez, las sillas son símbolo de transmisión. Son lugar de reunión en las puertas de las calles o trono de patrones en las fiestas de muchos pueblos. De este modo, a estas dos primeras sillas se les ha ido uniendo nuevas compañeras, casi 200, nacidas de otros 60 pueblos, asociaciones y ciudades», explicaron ayer desde la plataforma ciudadana.
Las sillas están decoradas con mensaje de Machado, recuerdos de antepasados o con arte «salido del alma», pero sobre todo «gritan contra la despoblación» y «contra un Gobierno que ha prometido, pero no cumple, medidas justas y equitativas para con ellos». «Transporte, sanidad, internet, una vivienda digna… son derechos para los españoles. Sin embargo, por lo que está comprobado, no todos los españoles son iguales ya que no tienen los mismos derechos», sentencian desde Soria Ya.