Los hosteleros reclaman que las terrazas tampoco se cobren en 2022

Con la expectativa de que la pandemia pase a una regresión mayor y que la normalidad se instale en el horizonte, el presente de la hostelería pasa por limitaciones e incertidumbre. Entre estos dos elementos, la confianza en una transmisión controlada por las vacunas y una evolución incierta de los contagios, se mueve la necesidad de regular el futuro de las terrazas. Algo de lo que ya se ha venido hablando este verano y que el Ayuntamiento ha manifestado su intención de regular de manera que se reconduzca la amplia variedad de situaciones permitida en los últimos tiempos para facilitar el trabajo del sector a través de las terrazas. Los cambios en la Ordenanza abordaron ayer una etapa con una primera reunión entre la patronal de la hostelería, Asohtur, y el Consistorio. Los hosteleros reclamaron que la tasa por veladores tampoco se cobre en 2022. El Ayuntamiento la suprimió en 2020 y 2021 y, como en otras ciudades, tiene que decidir qué hace ahora no sólo con este aspecto de la fiscalidad, sino también con las ubicaciones inusuales y los ornatos. .

Asohtur puso sobre la mesa la «exención de tasas y flexibilización durante el próximo año», explicó la concejala de Comercio, Yolanda Santos, al término del encuentro. La decisión todavía no está tomada, pero la postura municipal pasa por las facilidades en tanto las restricciones se mantengan. En ello «vamos a trabajar el Ayuntamiento, aunque entendemos que mientras siga la situación sanitaria como está y sigan las restricciones de aforo y de condiciones a la hostelería, tenemos que seguir teniendo estos criterios de flexibilidad que se han mantenido siempre desde el Ayuntamiento», refirió la concejala.

Santos enmarcó la reunión en el debate de los «posibles cambios o mejoras que quieran hacer en las ordenanzas» desde los sectores afectados. El Consistorio ya había contactado con Asohtur y la Cámara de Comercio para recabar propuestas y ayer se encontró con la patronal de la hostelería para ahondar en este sentido. Ambas partes trabajan «en la misma línea de objetivos de mantener el empleo, el trabajo» y mantener unas referencias «claras» de ornato y ubicación de veladores.

Con la variedad e imprevisibilidad de las medidas sanitarias, la terraza se ha convertido en un recurso indispensable para mantener muchos negocios. Además de suprimir la tasa en dos ejercicios, el Consistorio atenuó los requisitos para emplazar mesas y sillas, también en lugares inusuales como espacio de aparcamiento, y dio facilidades para ubicar instalaciones fijas. Al tiempo afinaba los criterios de ornato ya presentes en la normativa. Como en todas las ciudades españolas, lo que se plantea ahora es reconducir de alguna manera la situación y seguir poyando a un sector que conoce la incertidumbre de las medidas sanitarias.