ECONOMÍA
Los camiones toman el centro para protestar por la subida del gasoil
Agrutranso decide este sábado en asamblea general si se suma a la huelga del sector
Decenas de camiones cruzaron ayer a golpe de claxon la capital soriana a media mañana en el quinto día de las protestas del sector por la subida del precio de los carburantes, lo que dejó bloqueado el tráfico en el centro durante más de media hora. Se dieron cita camioneros de todas las comarcas de la provincia, que ‘invadieron’ las calles con sus vehículos, para visibilizar un problema que está ahogando a los transportistas porque con el gasóleo disparado no pueden hacer frente a los costes de sus negocios.
La huelga, convocada por la Plataforma en Defensa del Sector del Transporte Nacional e Internacional de Mercancías, que desde el lunes viene haciendo un llamamiento al paro del sector por la escalada del precio de los carburantes, no contaba hasta el momento con el apoyo de la Agrupación de Transportistas Sorianos (Agrutranso), que decidirá hoy en asamblea general si se suma a la protesta a partir de ahora.
Los camiones entraron en la capital por la calle Almazán, para continuar por la avenida Mariano Vicén y avenida de Pamplona hasta Mariano Granados. De ahí por Nicolás Rabal para bordear toda la dehesa por Mosquera de Barnuevo y a la calle San Benito, después a la calle Tejera a Santo Tomé, la cuesta de la Dehesa Serena y San Agustín, ya para ‘despedirse’ de la ciudad.
A la vista de la situación, Agrutranso celebró este viernes una junta directiva que convocó para este sábado una asamblea general de socios para tomar una decisión al respecto sobre si la agrupación se suma a la huelga o no. «Será lo que decida la mayoría», explicó ayer Juan Pablo Rubio, vicepresidente de Agrutranso, que cuenta con más de 200 socios.
La huelga estaba teniendo sus efectos en la provincia con incidencias esporádicas y en puntos estratégicos, si bien hasta ahora los camioneros no se habían desplegado por la capital para hacer efectiva su protesta ante el resto de ciudadanos. El pasado miércoles se registraron retenciones en la rotonda del Caballo Blanco por la presencia de piquetes, que también se han personado en los polígonos de la capital y algunas de las principales zonas industriales de la provincia. No obstante, desde Subdelegación del Gobierno confirmaron ayer la presencia policial desde el lunes en puntos sensibles para evitar incidencias.
Los que tampoco lo han tenido fácil son los camioneros de la provincia en otros territorios. Javier Jiménez, CEO de Molinero Logística, denunció ayer los ataques que están sufriendo sus trabajadores.
De hecho, uno de ellos tuvo que ser hospitalizado en Málaga, donde permaneció dos días por cortes en la cara, tras romperse el cristal de su vehículo por una pedrada en Antequera. Y aseguró que llevan más de 300 ruedas pinchadas. Por no hablar de las pintadas en los camiones. Jiménez manifestó que ni su empresa, ni DPM ni De Pedro secundan la huelga, pero pidió que les dejen trabajar. Aunque la subida de los carburantes también les afecta, lo que han hecho es repercutir esa diferencia a sus clientes.
Precisamente CEOE Castilla y León condenó públicamente los actos violentos y antidemocráticos de bloqueo de la actividad por parte de un sector del transporte por carretera, que está ocasionando graves perjuicios en la cadena de suministros de sectores como la industria, el comercio y el sector agroalimentario, que legítima y libremente deben poder ejercer su actividad.
En opinión de la Confederación, nada justifica que haya violencia o se paralice la actividad. Esta situación no hace sino empeorar las dificultades por las que pasan las empresas en general, y el transporte y la logística en particular, derivadas del incremento desbocado de los costes energéticos agravados tras el inicio del conflicto bélico.
Así lo trasladó CEOE Castilla y León en la reunión mantenida ayer con la delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, con quien mantiene una comunicación constante en las últimas horas, ante los graves acontecimientos ocurridos y las movilizaciones convocadas.
La Confederación ha solicitado al Ejecutivo que actúe de forma inmediata para garantizar el imperio de la ley y se proteja el derecho y la libertad al trabajo de aquellos que, legítimamente, desean ejercer su actividad. Por ello, se ha comprometido a informar puntualmente a la Delegación de Gobierno, con la colaboración de todas sus Organizaciones Miembro, de los incidentes que se vayan produciendo, para garantizar la actividad de las empresas.
Por último, la Confederación reiteró a la delegada del Gobierno que, con carácter de urgencia, el Ejecutivo ponga en marcha ayudas para paliar el impacto del incremento del coste del gas natural y del gasóleo en la actividad de las empresas.