INMIGRACIÓN
La población inmigrante aumenta un 3,7% en Soria hasta las 10.021 personas
Los extranjeros representan un 11% del total / El año cerró con 361 inmigrantes más / En la región se produce un nuevo récord de llegada de personas pero casi dos tercios son de la UE
Soria cerró 2021 con una población inmigrante de 10.021 personas, lo que supone un aumento del 3,7% con respecto al mismo periodo del año anterior, según los datos del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. En el año 2020 había 9.660 inmigrantes por lo que se ha producido un incremento en 361 personas. Los inmigrantes representan en la provincia un 11% de la población.
El hecho migratorio en Castilla y León crece sin parangón en un contexto de batalla ideológica en la Comunidad, desde los que apuestan por facilitar la regulación y quienes como en el acuerdo de gobierno PP-Vox se muestran partidarios de la promoción de una «inmigración ordenada que, desde la integración cultural, económica y social, y en contra de las mafias ilegales, contribuya al futuro» la región, que ha levantado ampollas en la izquierda.
Castilla y León cerró el ejercicio con 195.446 inmigrantes regularizados, lo que supone que sumó 5.574 a la lista en un año, un 2,9%, con la mayor cifra de la serie histórica, según los datos que facilita el Observatorio Permanente de la Inmigración, informa Ical. Eso sí, hay que reseñar que prácticamente dos tercios son ciudadanos de países de la Unión Europea.
La sentencia del Tribunal Supremo que relajó las condiciones para el acceso al arraigo laboral, por la que es suficiente haber estado dos años seguidos en España y acreditar relaciones laborales de al menos seis meses, impulsó la regularización de extranjeros en la Comunidad. Y es que el cierre de fronteras por la COVID redujo la llegada y abrió más posibilidades a la obtención de los contratos de un año, que exige ese tipo de regularización.
El guarismo récord de inmigrantes en la Comunidad se logra tras cuatro ejercicios de desarrollo incesante en el número de foráneos regularizados. El precedente mejor registro se generó en el año 2011, cuando la Comunidad contaba con 183.454 foráneos ‘con papeles’, una cantidad que se cayó por la recesión hasta el suelo de 2016, cuando se redujo hasta los 172.621, para empezar nuevamente su ascenso, con 176.011 en 2017, 179.179 en 2018, 185.482 en 2019; y 185.482 en 2020, el año de la pandemia.
El informe recientemente publicado por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones indica que en Castilla y León había al cierre de 2021, un total 136.326 inmigrantes con certificado de registro como miembros de la UE, lo que supone que en el último año llegaron dentro de este grupo 1.730 persona la Comunidad. Asimismo, cabe destacar que 617 personas residentes en Castilla y León se acogieron a la regularización a través del Acuerdo de Retirada de Reino Unido de la UE, por el Brxit.
Además, las cifras que proporciona el Gobierno, recabadas por Ical, precisan que en Castilla y León, había a fecha 31 de diciembre de 2021, un total 58.503 extranjeros dentro del régimen general, con autorización de estancia, que representan un aumento en 3.227 en un año.
Un análisis de las nacionalidades, pone de relieve que dentro del colectivo con certificado de registro, rumanos, búlgaros y portugueses, constituyen los colectivos más numerosos con diferencia, y entre las nacionalidades del régimen general, la marroquí se lleva la palma. En concreto, el colectivo de rumanos suma 45.223 efectivos en Castilla y León, seguido por el de los 34.391 búlgaros censados, junto a los 19.556 portugueses; y fue de la UE, los 24.560 marroquíes. Entre estas cuatro nacionalidades suman 123.730 efectivos, es decir, el 63,3 por ciento de los 195.446 inmigrantes regularizados en la Comunidad.
Por otra parte, cabe destacar que las autorizaciones de trabajo a extranjeros alcanzaron en 2021, las 3.155, lo que supone un crecimiento del 6,9% respecto al dato de 2020, y la cifra más elevada desde 2013 (4.484). Sin embargo, el número sigue siendo muy inferior al de 2007, cuando se alcanzaron 28.290, y empezaron a caer por la crisis, cuando las autoridades tuvieron que cerrar el mercado laboral para dar prioridad a los nacionales y sólo dejaron a los foráneos las profesiones sin cobertura definidas a través de un catálogo.