INFRAESTRUCTURAS
Los 17 km de autovía que han tardado 5 años más que construir el Eurotúnel
La ministra inaugura este viernes el tramo Venta Nueva-Santiuste de la A-11, un acto al que también asiste Mañueco / El trazado ha batido récords de retraso: 13 años, como el Transiberiano
La ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, protagoniza este viernes una bochornosa inauguración del tramo soriano de la Autovía del Duero (A-11) entre Venta Nueva y Santiuste. En trazados que se han extendido en el tiempo, lo normal es que directamente se produzca la puesta en servicio, sin cortes de cinta, para el sufrido automovilista que debe afrontar una auténtica odisea en la maltrecha y peligrosa N-122. No va a ser el caso.
Sánchez asiste a un acto de inauguración en el que también estará el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, y la delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, mientras han declinado la invitación los procuradores de la agrupación Soria Ya, quienes de todas formas han anunciado para la celebración de un acto reivindicativo en las proximidades del enlace de Torreblacos, donde se celebrará el acto institucional. Para la plataforma «no hay nada que celebrar».
Nada menos que 13 años han transcurrido desde que en diciembre de 2008 se licitará este tramo de 17 kilómetros que inicialmente se presupuestó en casi 65 millones de euros y que ha costado 25 millones de euros más de lo previsto, es decir, 90 millones de euros.
Ni siquiera algunas de las más importantes obras de ingeniería mundial han tardado tanto tiempo como este tramo de la A-11. Como muestra un botón. La construcción del Eurotúnel, que une Francia con el Reino Unido a través del Canal de la Mancha, se inició en el año 1986 y terminó en 1994, es decir, 8 años. Su longitud es de 50,5 kilómetros, 39 de ellos submarinos, con toda la complejidad que ello conlleva para dar cabida no solo al transporte ferroviario sino también al de circulación de vehículos.
Pero hay una obra que ha tardado exactamente lo mismo en construirse que este tramo soriano de la A-11: el Transiberiano. Se trata de la línea férrea que conecta las ciudades de Moscú, capital de Rusia, en el continente europeo, y Vladivostok, en la costa rusa del océano Pacífico, en el mar de Japón. Es la más extensa del mundo con 9.288 kilómetros y ocho husos horarios recorridos. La ruta principal fue inaugurada el 21 de julio de 1904, después de trece años de trabajos; toda una proeza con los medios existentes entre finales del siglo XIX y principios del XX. Se adentra en el corazón de Siberia y se ha convertido en una gran meca viajera, pero el Transiberiano es, sobre todo, una ruta comercial que vertebra el vasto país de oeste a este y que sigue siendo muy utilizada por los rusos para sus viajes domésticos.
El Venta Nueva-Santiuste ha batido récords, la mayoría de ellos negativos. En el seno de la sociedad soriana siempre ha habido un clamor para que, de una vez por todas, se superara el obstáculo que representa en la N-122 el puerto del Temeroso, escenario habitual de accidentes, algunos de ellos muy graves y mortales, que han afectado sobre todo a los profesionales del transporte. Al menos ese punto negro va a quedar borrado con la autovía y la mejor noticia es que estos nuevos 17 kilómetros van a suponer medio centenar convertidos en vía de alta capacidad después de casi dos décadas de obras.
El tramo lleva más de una década en obras y para la provincia de Soria tiene una gran importancia ya que permitirá salvar el principal punto negro de las carreteras que atraviesan la provincia, el puerto del Temeroso. Con la adición de estos 17 kilómetros la A-11 soriana alcanza el medio centenar de kilómetros después de casi dos décadas de obras. Para completarse todo este ‘eje vertebrador’ en la provincia de Soria que es la A-11, aún faltan por construirse 53 kilómetros más.
El tramo Venta Nueva-Santiuste representa un ‘monumento’ a la impotencia política, la nota predominante cada vez que Soria tiene por delante un proyecto relacionado con las infraestructuras. Tras su licitación en diciembre de 2008, en julio de 2009 se adjudicó el contrato a la Unión Temporal de Empresas (UTE) formada por Cyopsa-OPR. Pero ¿cuántos ministros han vivido la tramitación y construcción de estas obras? Nada menos que 7, cuatro socialistas y tres populares. La licitación del tramo se produjo con la ministra socialista Magdalena Álvarez al frente de Fomento y se adjudicó cuando otro socialista, José Blanco, acababa de asumir la cartera. Su apertura se situará bajo el mandado de Raquel Sánchez, también del PSOE, pero entre medias han pasado los populares Ana Pastor, Rafael Catalá e Íñigo de la Serna. La nómina de ministros que han tenido en sus manos esta obra se completa con el socialista José Luis Ábalos.
¿Y cuál era realmente el plazo estimado de estos trabajos que han resultado ‘eternos? Dos años y medio, Una previsión de 30 meses ha quedado convertida en 156 mensualidades y con los gastos disparados.
Las contingencias para este tramo no tardaron prácticamente nada en aparecer. Tras su adjudicación en verano de 2009 las obras apenas avanzaron en aquel momento y el tramo fue víctima de la célebre ‘reprogramación’ de las obras decretado por el titular de Fomento en aquellos años, José Blanco. Esa paralización afectó a todos los tramos de la A-11 soriana. Hasta el año 2015 no se levantó el veto a las obras, pero esa decisión, tomada por un Gobierno del PP, tampoco sirvió para acelerar las obras en este punto. Y es que el tramo Venta Nueva-Santiuste aún sufrió una ralentización de los trabajos ‘por los romanos’.Y es que apareció durante las obras un tramo de la calzada romana entre Numancia y Uxama (El Burgo de Osma) entre 2017 y 2019, lo que obligó a un modificado de obras de casi 6 millones de euros en el que se incluía la protección del hallazgo.
Cuando los trabajos parecían alcanzar por fin una velocidad de ‘crucero’ y resultaba viable su inauguración en 2021, surgió un nuevo retraso, esta vez a cuenta de la última capa de rodadura y los últimos remates. A principios de mayo el Gobierno informó de que se había procedido a iniciar los trabajos para completar las obras. Desde ese momento se estimó un plazo de entre 6 y 8 semanas para su puesta en marcha. En este caso, el marco temporal si se ha cumplido para su inauguración este 17 de junio, a una semana del día de San Juan de 2022.
Llama también la atención la visita de la ministra para inaugurar el ‘tramo de la vergüenza’ cuando ni siquiera tiene previsto, de momento, una reunión para analizar con los responsables de la Junta el estado de las infraestructuras pendientes en Castilla y León.
El coste del acto de inauguración es una incógnita. Fuentes de la Subdelegación del Gobierno en la provincia han señalado desconocer ese dato. El acto se celebra a 2,5 kilómetros del referido enlace de la N-122 en Torreblacos. Se instalará una carpa, un hito, un acceso peatonal a la carpa, un aparcamiento de vehículos para autoridades y otro para el resto de vehículos.
El presidente del Partido Popular de Soria, Benito Serrano, ha exigido que la ministra de Transporte, además de realizar un «viaje protocolario, sea capaz de aprovechar su visita a Soria para comprometerse en la realización de infraestructuras que se encuentran paralizadas, como la Autovía de Navarra».