Heraldo-Diario de Soria

JUICIO DE TIK TOK

Juicio por la bofetada en Tik Tok: «Él nunca me ha maltratado»

El juicio por un presunto delito de violencia de género durante un directo en la red social queda visto para sentencia 

Juicio al acusado por la bofetada en TikTok. MARIO TEJEDOR (2)

Juicio al acusado por la bofetada en TikTok. MARIO TEJEDOR (2)

Publicado por
V.R.A.
Soria

Creado:

Actualizado:

«No quiero declarar pero quiero añadir algo: él nunca me ha maltratado». Esta ha sido la única manifestación realizada hace escasos minutos por la joven que recibió una bofetada durante un directo de Tik Tok el pasado 28 de enero en el juicio que ha tenido lugar por un presunto caso de violencia de género contra su marido.  

Tanto ella como su marido, conocido como Lucifer en las redes sociales, llegaron juntos de la mano al Juzgado y se han acogido a su derecho a no declarar aunque ella, a preguntas de la magistrada y visiblemente muy nerviosa, quiso hacer esa puntualización indicando que la realizaba «libre y voluntariamente» y «sin ningún tipo de coacción». El juicio ha quedado visto para sentencia cuyo fallo, tal y como indicó la magistrada del Juzgado de lo Penal número 1 de Soria, se conocerá, previsiblemente, a finales de esta semana.

La vista pública se ha celebrado en la Audiencia después de que el acusado rechazara a principios de febrero un acuerdo de conformidad con la Fiscalía en el juicio rápido al que se sometió tras su arresto ante el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3, con competencias en materia de Violencia sobre la Mujer.

Durante el juicio, en el que sí ha declarado la agente que tomó declaración a la pareja cuando fueron a denunciar en Comisaría el acoso y las amenazas recibidas tras la repercusión mediática que había adquirido el suceso, tanto el Ministerio Fiscal, como la defensa elevaron a definitivas sus conclusiones.

Es decir, la Fiscalía pide para él un año de prisión por un delito de maltrato de los artículos 153.1 y 153.3 y la privación del permiso para portar armas durante tres años, además de la prohibición de acercarse y comunicarse con la víctima durante el mismo periodo de tiempo.

Mientras la defensa pide la libre absolución acogiéndose «a un atestado lleno de irregularidades donde la joven aparece en momentos como denunciante y otros como víctima por lo que no tiene valor probatorio y no nos vale como prueba de cargo». Además, los vídeos aportados, que han sido emitidos en la sala, continuó el abogado defensor, «no cuentan con informe pericial para garantizar su veracidad». Y, destacó, «pasa lo mismo con el video del informe ampliatorio del 6 de febrero» donde la joven habla de dos palizas: «No se identifica al interlocutor, no sabemos la fecha en la que está grabado ni el contexto en el que se produce». Es más, continuó, «los videos de los directos no se guardan en ningún sitio, es un tercero, un usuario, el que debe grabarlos por lo que podrían haber sido manipulados por terceras personas». Hizo hincapié también en que «en ningún momento se ha comprobado dónde se produce» el directo de la bofetada. «Se da por supuesto que es en casa pero ni se pregunta ni se comprueba a través de la IP del ordenador o mediante la localización del móvil desde el que se realiza la conexión». En definitiva, «pedimos la libre absolución porque los elementos aportados no valen como pruebas de cargo».

Hay que recordar que en el vídeo que llevó a la apertura de estas actuaciones judiciales se podía observar cómo una usuaria de Tik Tok recibía una fuerte bofetada mientras se encontraba conversando en directo con tres chicos jóvenes.

Inicialmente manifestó en directo que había sido su padre, enfadado con ella, para reconocer finalmente que había sido su pareja. El caso generó un gran revuelo y airadas reacciones en las redes sociales. La pareja se presentó tres días después en comisaría para denunciar los insultos y amenazas que estaba recibiendo, momento en el cual se detuvo al presunto agresor. 

Según confirmaron fuentes oficiales, se trata de un varón de 31 años y nacionalidad búlgara que no tiene antecedentes penales. Fue puesto inicialmente a disposición judicial en el Juzgado Número 4 de Soria, que acordó su libertad pasando a disposición del Juzgado Número 3 de Soria, con competencias en materia de violencia de género pasando la noche en las dependencias de la Comisaría de Soria. La víctima es su esposa, de 23 años y también de nacionalidad búlgara.

Entonces se celebró un juicio rápido en el que no aceptó el acuerdo de la Fiscalía, que pedía un año de prisión (que no cumpliría al no tener antecedentes), no comunicarse ni acercarse a la agredida en ese mismo periodo y una orden de protección a la supuesta víctima.

Por aquel entonces el acusado se acogió a su derecho a no declarar, al igual que su pareja, quien además renunció a cualquier medida de protección, así como a contar con asistencia letrada y a ser reconocida por el médico forense.

Ante esta situación, la Fiscalía pidió, como medida cautelar hasta la celebración del juicio de este martes, una orden de protección. El juzgado decidió denegar esta solicitud alegando que "con los datos disponibles hasta ahora no se aprecia que concurra una situación objetiva de riesgo" para ella y que "desde que sucedieron los hechos (hace cuatro días) el matrimonio ha seguido conviviendo".

Además tuvo en cuenta que el investigado no tiene antecedentes penales y que la mujer no ha interpuesto ninguna denuncia contra su marido. Es más, en su declaración como perjudicada, pidió que no la separen de su marido y que tampoco separen a su hijo de 2 años de su padre. 

tracking