La Mancomunidad de Tierras Altas suspende de forma definitiva la celebración de la trashumancia

Finalmente no habrá fiesta de la trashumancia en Tierras Altas. El consejo directivo de la Mancomunidad decidió ayer suspender de manera definitiva la actividad turística, que ya había sido aplazada de este fin de semana a los días 6, 7 y 8 de julio debido a la situación del bloqueo del ganado de Eduardo del Rincón en Ciudad Real por el foco de viruela ovina.

La festividad, concebida ya como un paquete turístico, estaba prevista para desarrollarse desde hoy jueves hasta el sábado, pero debido a las trabas administrativas que estaba sufriendo Eduardo del Rincón, encargado este año de realizar la trashumancia para Tierras Altas con sus ovejas, recorriendo el viaje de vuelta por la provincia (pasando como cada año por la capital), la entidad decidió postergar a los días 6, 7 y 8 de julio. 

Pero el ganadero de Los Campos sigue atrapado en Ciudad Real, sin poder mover a sus 1.000 animales de Brazatortas por las restricciones sanitarias de Castilla-La Mancha a raíz del foco de viruela ovina, y aunque se resolviera su situación antes de esa fecha, los animales deben estar en cuarentena, de modo que hasta agosto no serían ‘libres’.

Por ello, la Mancomunidad acordó ayer no volver a aplazar la actividad, en aras de mantenerla con Eduardo del Rincón, dado que todavía éste no tiene ninguna notificación en firme y a los turistas había que avisarles con antelación. «Dar unas nuevas fechas sin estar solucionado el problema sanitario no tenía sentido», señalaron fuentes de la Mancomunidad, muy a su pesar, dado que para la entidad, que aglutina a todos los municipios de las Tierras Altas de Soria «la trashumancia es un evento muy importante porque pone en valor la cultura y la etnografía de la zona en todo su conjunto». 

Este año tocaba realizar la actividad con el rebaño de Eduardo del Rincón, uno de los dos únicos trashumantes que quedan en la provincia de Soria; el otro es de Navabellida, localidad pedánea de Oncala, pero éste se va a Trujillo, en Cáceres.

La mala suerte llegó con el Gobierno de Castilla-La Mancha al ganado de este pastor de Los Campos, que lleva como trashumante desde hace 50 años, por considerar que se encuentra en el perímetro de seguridad de la zona del foco de viruela. No obstante, Eduardo del Rincón asegura que la finca que tiene arrendada para sus ovejas, y cuyo contrato finalizó el pasado 10 de junio, está a más de 200 kilómetros del citado foco.

Pero antes de plantear realizar la actividad con algún otro ganadero de la zona, la Mancomunidad ha preferido suspender de forma definitiva la actividad.